"Estamos trabajando para poner todo a punto y arrancar lo antes posible en el nuevo obrador, aunque sea haciendo unos pocos productos". Tras el incendio de su fábrica en Dueñas (Palencia), Cascajares comienza a funcionar con sus oficinas asentadas en la localidad vallisoletana de Villanubla, así como un obrador alquilado en La Cistérniga.
Fuentes de la empresa señalaron a la Agencia Ical que están más asentados en las oficinas provisionales cedidas por otra empresa, donde se lleva a cabo el trabajo de contabilidad y administración como "si no hubiera pasado nada".
En relación a los ERTE, apuntaron que todavía no se han producido avances y no se ha firmado nada, situación similar en lo que tiene que ver con la nueva fábrica, dado que los peritos finalizaron ayer su labor y han realizado los informes de cómo comenzó el incendio, aunque tienen que derivar los datos a la Guardia Civil.
"Una vez que nos dejen entrar en la fábrica y se pueda ver el estado de la estructura, analizaremos si la fábrica se construye en el mismo punto o en un terreno adyacente", añadieron fuentes empresariales.