Windsurf, kitesurf, pádel surf, piragüismo, remo... Estos y otros deportes náuticos se podrán practicar en la presa de cola de Castrovido una vez que se complete el proceso de puesta en carga del embalse, que tardará al menos 2 años, según ha reconocido hoy en una visita a la zona la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés.
En el caso de las embarcaciones de motor, solo se permitirán aquellas con sistemas de propulsión eléctrica, que no realicen ningún tipo de vertido a las aguas.
Danés y el presidente de la Junta de Ledanías, Francisco Azúa, han firmado hoy un convenio que supone la cesión por parte del Organismo de la obra lúdico-recreativa ejecutada en el embalse de Los Vados, como proyecto complementario a la Presa de Castrovido, para su uso y mantenimiento.
Estas obras, cuyo presupuesto asciende a 124.284 euros, pretenden poner en valor el nuevo ecosistema y armonizar la coexistencia de los posibles usos ecológicos, deportivos, lúdicos y recreativos de esta zona, informa la CHD. Tras la construcción de la presa de Castrovido, y como consecuencia de la ejecución del azud de los Vados, se forma un embalse de 3 hm3 de capacidad y una superficie de 104 Ha, con una clara vocación medioambiental, destacando la creación de islas artificiales que favorecen el establecimiento de avifauna que colonice el nuevo ecosistema y una playa que permita el uso lúdico del embalse, que ahora se pone a disposición de la Junta de Ledanías para su conservación y mantenimiento.