Rodrigo Losúa Iruretagoyena, al igual que Enrique Villarreal 'El Drogas', lo ve todo en «blanco y negro» desde hace poco más de un mes, aunque su baile salvaje poco tiene que ver con el del artista. El vaso no es su amigo mudo, más bien lo son el ordenador y los libros, y contemplará las mismas caras durante semanas. La isla Decepción, a 13.000 kilómetros de distancia, en el Polo Sur, se ha convertido en el nuevo destino del subteniente del Ejército de Tierra y la misión en la «más especial» de su larga carrera.
Mecánico de profesión y destinado en Alicante, su cometido en la XXXVIII Campaña Antártica será múltiple. Además de cooperar con los otros doce compañeros militares -entre los que hay cocineros, un médico, una veterinaria, personal de navegación, técnicos en instalaciones, todos ellos dirigidos por el capitán de transmisiones del Ejército de Tierra Eduardo Pérez- comparte vivencias y conocimientos con investigadores de las universidades de Cádiz (el equipo Dichoso) y Granada.
El briviescano partió hacia La Antártida el 26 de diciembre y tras un viaje por tierra, mar y aire que duró una semana, el 2 de enero llegó a la base Gabriel de Castilla. Tanto él como sus compañeros celebraron el año nuevo comiéndose las uvas en medio de una travesía por el Pasaje de Drake, conocido como el lugar más peligroso y hostil de todos los océanos del mundo.
Rodrigo Losúa, natural de Briviesca, se encuentra en la Antártida junto a un grupo de militares e investigadores. Repetirá experiencia en 2026. - Foto: DBAquí siento que la naturaleza no tiene miedo al ser humano, diferente a lo que ocurre en el resto del mundo»
En febrero de 2024 se enteró de que formaría parte de la actual misión y a partir de marzo recibió formación específica y un entrenamiento exhaustivo acorde a las condiciones del lugar más remoto del planeta. Su trabajo consiste en mantener en buen funcionamiento las instalaciones de la base porque «aquí un fallo mecánico puede ocasionar muchos problemas», comenta.
Para el burebano las temperaturas del verano austral no suponen ninguna pega. «Ahora hace más frío en Burgos», bromea. Los días buenos se mantienen entre los 0 y 4 grados aunque cuando el viento sopla con ganas -un hecho bastante habitual- la «sensación térmica baja bastante», reconoce. Si bien, los monos especiales de trabajo impiden que el cuerpo se congele. «Aquí no venimos a lucir palmito, pero si uno se tiene que disfrazar de pingüino, pues se disfraza», declara entre risas al recordar la conexión que realizaron el miércoles con David Broncano en el programa La Revuelta.
Otros compañeros ya conocían la isla, pero a pesar de todo lo que le habían contado y ver fotografías no se imaginaba que el lugar fuera tan sorprendente. Se ha encontrado una «tierra de límites borrosos, un territorio cambiante que hora a hora muta», expone. El paisaje le resultó aún más inesperado. «En lugar de una inmensidad blanca estoy rodeado por el tono negro de un volcán activo, hay nieve, pero se aprecia más el color blanquecino de una niebla casi constante», añade. El aseo personal no supone un problema a la hora de minimizar la huella humana y todos los productos que emplean son especiales. El agua del que se nutren por primera vez procede del lago Zapatillas, formado en el cráter.
Las temperaturas en el verano austral no son tan duras para un burebano acostumbrado al frío»
La comunicación con su gente está asegurada gracias al «gran rúter» del que disponen y a diario habla con su mujer Esther y sus amigos. «Aquí el WhatsApp no falla», aclara. En el tiempo libre entrena en el gimnasio, devora libros, ve películas, juega al futbolín o se da un paseo. No sigue los partidos del CF Briviesca, pero la bandera del equipo le acompaña a todas partes. Desde que aterrizó siente que la «naturaleza no tiene miedo al ser humano. Es increíble ver leones marinos o miles de pingüinos a tu alrededor», relata. Sin duda, esta es la aventura de su vida.
Apadrina un pingüino en el polo sur. Un año más, coincidiendo con la fase de despliegue de la Campaña Antártica, arranca también el periodo de apadrinamiento gratuito de pingüinos de isla Decepción. Con esta iniciativa se pretende ayudar a difundir el compromiso con el cuidado del Medio Ambiente y que estos animales sobrevivan a la edad adulta. Los interesados deben rellenar un formulario a través de la página web ejercito.defensa.gob.es.