En mayo de 2024, justo tras el anuncio de dimisión de Roberto López de Davalillo, adelantó que buscaría un equipo para concurrir a las elecciones de la Cofradía de San Juan del Monte. Ahora, con el proceso para presentar candidaturas terminado, se ha convertido en presidente electo sin enfrentarse a ningún rival. Carlos Calvo llega con «una caja de nuevas ideas bastante grande», tras conocer desde la hostelería y los medios cómo funcionan las fiestas. Eso sí, cree que necesitará tiempo para lograr retos como el aumento de ingresos de la entidad.

¿Qué siente al ser presidente electo?
Es una satisfacción grande, porque es algo que hace muchos años lo venía diciendo. En mis dos profesiones, la hostelería y los medios de comunicación, lo decía, que me encantaría trabajar en la Cofradía porque me gustan las fiestas y organizarlas me llamaba la atención. Ha pasado el tiempo, he madurado, tengo tiempo al estar jubilado y era la oportunidad si encontraba un equipo. Se siente satisfacción y eso que hasta que no tenga las llaves, los poderes, no se empezará a disfrutar. He demostrado que me gusta, porque he hecho muchas cosas a la sombra por San Juan del Monte mientras trabajaba en los medios de comunicación. Por ejemplo, cuando se crearon unas postales con carteles  que se vendieron y se ayudó para hacer el monumento al Sanjuanero; también con una revista para incentivar que la gente se hiciera cofrade o más tarde una campaña para que hubiera más candidatos a rey y reina. Además he presentado algunos actos, es decir, me he metido dentro de ello. Hay gente que, como en mi caso, no estamos en cuadrilla y estamos a la sombra, pero metidos en la Cofradía hasta las trancas. 'Por ejemplo, el título de fiesta interés turístico nacional se recuperó gracias a mí. Estando Pablo Vergara en la Cofradía, yo tenía el bar Deportivo y se ponían vídeos y fotografías de San Juan de mi archivo. La junta directiva vio eso que yo tenía y ellos necesitaban para llevarlo a Madrid y reclamar ese título. Desde la Asociación Musicón Miranda esos archivos siguen viendo la luz, se están haciendo documentales y la gente está respondiendo bien. Esa asociación  va a colaborar con la Cofradía.

¿Cuál es su primer reto?
Escuchar a la gente. A las cuadrillas, a los ochotes. El equipo va a intentar dividirse para escucharles y aplicar cambios de fechas u horarios, diferentes ideas, y retomar algunas tradiciones. San Juan del Monte ha cambiado mucho, sobre todo porque viene una juventud que ha fundado cuadrillas y ya hay 70. A esa juventud hay que decirle algunas cosas para que se acople más a la fiesta en la calle. No tengo nada en contra de las lonjas, pero igual alguna cuadrilla que las usa puede autoconvencerse y hacer otra cosa.La cuestión es escuchar sus demandas, porque luego no va a gustar a todo el mundo, pero con una mayoría se puede acertar si lo haces bien.

El título de interés turístico nacional se recuperó gracias a mí»

¿Pedirá consejo a expresidentes?
Ya se me han ofrecido expresidentes y gente de exdirectivas. Tengo amistad con todos, no me he enemistado con nadie cuando estaba en la hostelería o los medios. Cuando monté el tercer bar e hice un paréntesis en los medios vi que me llamaron de todos los medios y que mucha gente venía a verme al bar, hasta los partidos políticos o sindicatos. Ahora con la Cofradía creo que sumo más gente de la que resto, creo que soy una persona querida... DJ en la noche, camarero de día, saliendo a la calle con los medios... La gente te ve y ves cómo responde, que te aprecian y te dan las gracias por la labor que haces en las fiestas. En los medios se hace una labor muy importante y es algo que quiero tocar, que se llegue a los regionales y nacionales, a llamar a sus puertas para que San Juan del Monte salga más en los medios.

Esa buena relación con mirandeses muy diferentes igual le ayuda ahora que alrededor de la Cofradía hay un ambiente enrarecido. ¿Cómo se puede dar la vuelta a la situación?
Todo el mundo sabe lo que ha pasado en estos dos años, pero también han hecho cosas bien, yo no quiero hablar de la última directiva. Vamos a continuar con lo bueno que han hecho, por ejemplo, con el pregón el viernes. Luego hay otras cosas, como los ochotes, que tienen que volver a su fecha tradicional, o hablar con el Mirandés para comunicarnos y mover la fecha del partido que sea en fiestas para que no coincida con el pregón como el año pasado.

Creo que sumo más gente de la que resto, soy una persona querida»

¿Cuál es su modelo en cuanto a actos musicales? ¿Multiverbena?
Lo mismo que las cuadrillas son el alma mater de las fiestas, la hostelería es necesaria. Hay que mimarla, escucharla y luego ya veremos qué horarios, verbenas, DJ's... En función de lo que nos diga obraremos para que se reparta, que no es tan difícil. Igual se puede llevar algo, a la tarde o al mediodía, a la calle Logroño, para no molestar mucho a los vecinos. San Juan delMonte es de todos, no solo de componentes de cuadrillas o de cofrades, sino también de más mirandeses. Es una fiesta del pueblo para el pueblo y la Cofradía es independiente, del pueblo. El 90% de los actos son gratuitos y abiertos a todos, y son para la ciudad.

El hecho de que sea casi todo gratuito limita los ingresos de la Cofradía. ¿Es sostenible el sistema de financiación? ¿Cómo espera que sea la votación de las cuentas de 2024?
No me asusta porque ya es tradición el traspaso de una junta a otra en negativo. La única positiva fue la de Álvaro de Gracia, que rebasaba los 80.000 euros. Ahora hay que saber si está en negativo y cuánto, para recaudar dinero más o menos despacio. Hay que hacer una auditoría, no es algo que se me ocurriera solo a mí, tengo mis asesores financieros que me los han aconsejado. Dentro del mundo comercial era ambicioso y en la Cofradía quiero seguir siéndolo. Quiero más dinero porque es necesario. El domingo al mediodía, que se junten tantas charangas es muy bonito, pero cuesta dinero. Son 1.200 músicos que vienen aquí a estar con nosotros y es algo que pocas fiestas consiguen tener. Cuesta mucho dinero y es un esfuerzo de las cuadrillas, y la Cofradía debe buscar más dinero, en entidades públicas y privadas, para darles más a las cuadrillas. También se pueden hacer cosas para que venga más gente de fuera. Si atraemos más gente de fuera hay que ofrecerles algo más, porque hasta ahora es difícil que disfruten con intensidad si no entran en cuadrillas. Hay que hacer actos que impliquen a esa gente que viene invitada y se necesita más dinero para ello. Si hacemos más grande a San Juan, hacemos más grande a Miranda.

Hay que salir fuera de Miranda para traer más dinero y hacer más grande la fiesta»

¿Da tiempo a aplicar estas ideas?
No va a dar tiempo a todo. Traigo una caja de nuevas ideas a la Cofradía bastante grande, pero no para el primer año o el segundo. Creo que se puede traer dinero de fuera, porque por ejemplo la hostelería de aquí es muy buena, pero es pequeñita, la mayoría son establecimientos familiares, y el comercio tampoco puede ayudar mucho más. Por eso hay que salir fuera de Miranda para traer más dinero y hacer más grande la fiesta.

Hay una decisión que debe tomar cada año: el pregonero. ¿Tiene alguna idea en mente?
No tengo a nadie en mente. Con mi equipo debo hablar y buscar un pregonero o pregonera, que sea una persona emotiva, sin descartar edades o profesiones. Sé lo que es hablar al público y es difícil, porque en los pregones hay gente que dice que no, porque le da pánico salir.

La hostelería es necesaria, hay que mimarla»

Igual cuesta buscar pregonero, como ha costado buscar miembros para su equipo o que salieran otros candidatos. ¿Qué ocurre en San Juan, que es una fiesta tan querida, pero cuesta que haya implicación?
Hay un desconocimiento muy grande de los mirandeses, también de sanjuaneros de pro. Hay muchos que agradecen el trabajo de la Cofradía, pero hay un desconocimiento. He llamado a mucha gente y es muy difícil. Algunos no han podido por razones de peso, pero me han contado que se emocionaron por el orgullo de que yo les llamara para estar en la junta directiva. Hay otros que tienen ese miedo por desconocimiento sobre la Cofradía, porque aquí hay muchos trabajos que hacer para colaborar. En las juntas directivas anteriores había poca gente mayor, casi todos trabajaban y en esta mía estamos solo cuatro jubilados, por lo que nos vamos a organizar. No vamos a esperar a última hora, por ejemplo, para diseñar y fabricar el carné. O sea, hay muchos trabajos en los que colaborar.

¿Tiene pensada la campaña de socios? ¿Se ha marcado un número como objetivo?
No voy a decir cifras, lo que voy a hacer es vendérselo muy bien a los mirandeses, recordando que hay un 90% de actos gratuitos, que estamos ahí. Cada granito de arena, cada cofrade que se retome es importante y los que no lo han sido nunca, también. De las pocas cosas que podemos vender fuera es el Mirandés o nuestras estrellas Michelin, y hay gente que viene a ver el Castillo o la historia del Campo de Concentración. Entonces, si tenemos la Cofradía abierta más horas o algún fin de semana podemos aprovechar los días que viene gente de fuera para que entren en la Cofradía y luego se sumen a las fiestas. Se puede vender mucho más la Cofradía al exterior para que la gente venga.