Los bubillos tienen puntería hasta sin buscarla. Uno de los pocos días que ha llovido en todo el año eligieron los vecinos de Guadilla de Villamar para tomar La Foto del Verano. A punto estaban de rendirse y anularlo todo. Pero supieron esperar y el cielo les recompensó con un decorado magnífico, propio de un momento épico.
Puntería, paciencia y épica. Tres conceptos claves en el arte de la guerra, y también para alcanzar la paz -en Ucrania y en el mundo- con la que ya soñaban allá por febrero, cuando empezaron a pensar en la temática de la foto para el concurso Mi Pueblo es el Mejor, que acaban de ganar por séptima vez con una reinterpretación del cuadro de Velázquez Las lanzas.
Abel Valdenebro, fotógrafo y uno de los coordinadores de la puesta en escena de Guadilla de Villamar, explica que buscaban un cuadro relacionado con la paz y, si bien el elegido representa una rendición, la de la ciudad de Breda en el año 1625, les pareció que se podía ajustar a las necesidades del concurso. «Lo fundamental es la participación», reseña Valdenebro. Y «el pueblo está entregado», como reconoce Alberto Rodrigo, jefe de Fotografía de Diario de Burgos, e integrante del jurado junto con Arturo Pascual, diputado provincial, Nieves Llanos, de Carrefour Burgos, y Marina Blanco, de Promecal.
Castrojeriz Camina. Ese lema llevan impresas las camisetas amarillas de los castreños que forman la flecha que «une nuestros orígenes, escribe nuestra historia y afianza nuestros valores» en el corazón del Camino del Santiago.Tras la ganadora de La Foto del Verano 2022 -concurso en el que han participado 31 localidades burgalesas- existe un trabajo de meses. Tuvieron que cambiar la perspectiva del cuadro, abrir el plano, realizar pruebas de luz, colocar uno a uno a los participantes, cambiar los caballos por «algo más de la tierra», concretamente unos borricos, esperar a que escampase...
Guadilla de Villamar obtendrá como premio 1.000 euros en metálico y otros tantos en vales de compra de Carrefour, mientras que el segundo y tercer clasificado recibirán 500 euros cada uno, y la misma cantidad para gastar en el hipermercado. Los elegidos son Castrojeriz, con su Flecha en el Camino, y Cameno, gracias a la Boda Antigua.
«Fue bastante más complicado de lo que parece. Pasamos muchos nervios», reconocen los impulsores de esta iniciativa en Castrojeriz, que lograron movilizar a cientos de personas un domingo de agosto, satisfechos hoy por el reconocimiento y por dar visibilidad a este municipio de la Ruta Jacobea.
Para Cameno era su tercera participación en el concurso. Aunque pensaron que el sol les había jugado una mala pasada, el resultado fue de premio. «Y sobre todo nos divertimos», subraya Ramón Miranda. «Hay 3.000 ideas para el próximo año», avisa. No es el único. «Tenemos una espectacular», apuntar desde Guadilla. En Castrojeriz también prometen batalla. ¿Alguien más se anima?