Se acerca la Navidad y los amigos de lo ajeno aprovechan las aglomeraciones de personas en todo tipo de tiendas para cometer hurtos y robos al descuido. Siempre ha sido así en esta época. Pero en los últimos años está aumentando una modalidad que preocupa especialmente a la Policía Nacional. En la presentación de la campaña de 'Comercio seguro' el comisario provincial, Jesús Nogales, advirtió de que «se están dando cada vez más los robos por encargo».
Y lo explicó. Hay personas que se ponen en contacto con delincuentes habituales, generalmente con algún problema de adicción a las drogas, a los que 'contratan' para que entren a supermercados o grandes almacenes para sustraer efectos de lujo, «como aceite de oliva, jamón de pata negra» y otros productos caros. A cambio les entregan un dinero -una cantidad sensiblemente inferior a lo que cuestan esos alimentos- «con la cual pagarse sus dosis».
El comisario hizo un llamamiento a la responsabilidad y anunció que durante los próximos días la Policía Nacional destinará unos 200 agentes a la vigilancia de las zonas más comerciales de la ciudad, tanto en el centro como en Gamonal. Unas tres cuartas partes de los efectivos pertenecen a la brigada de Seguridad Ciudadana, mientras que el resto forman parte de otras unidades y patrullarán de paisano, a fin de controlar de manera más discreta a los sospechosos.
Nogales recordó que durante la campaña de control del pasado año fueron identificadas más de 170 personas. No todas fueron detenidas, de hecho solo hubo 10 arrestados, pero se trataba de hombres y mujeres a quienes la Policía Nacional 'fichó' por su actitud más que sospechosa en todo tipo de establecimientos.
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