Las necesarias obras de rehabilitación del histórico edificio del Consulado del Mar, sede de la Academia Provincial de Dibujo, comenzarán este otoño. El proyecto ya ha sido aprobado y sólo falta la contratación de la obra, tal y como ha confirmado el diputado de Urbanismo, Ramiro Ibáñez. La polémica en torno al futuro del emblemático inmueble del Espolón una vez concluya la reforma ha sido zanjada por la diputada de Cultura, Raquel Contreras, quien ha asegurado que la bicentenaria Academia de Dibujo seguirá teniendo allí su sede. Otra cosa es lo que sucederá con el resto de espacios, toda vez que parece probable que la Institución Fernán González salga de este inmueble y se ubique en otro céntrico lugar en el que dispondrá de todo el espacio que lleva años reclamando.
Carlos Sáez, director de la Academia de Dibujo, celebra la decisión. « Era importante la reforma del edificio por cuanto se hará accesible, se mejorarán las estancias y parte del tejado; que el diputado y portavoz del PP,Borja Suárez, asegure que la Academia Provincial de Dibujo tendrá un futuro espléndido y enérgico en los próximos años, tras esta reforma, es una gran noticia». Y un alivio: los rumores en torno a la posible salida de la prestigiosa academia del lugar que ocupó siempre causó indignación en el mundo de las artes. Hubo que recordarle a la Diputación que el Ayuntamiento de Burgos le cedió el solar en el que se levantó el inmueble con la condición de que no tuviera otro destino que ser «Casa para la Escuela de Dibujo».De haber mantenido esa postura, la Diputación habría tenido que buscar la complicidad del Ayuntamiento, ya que el uso del edificio es educativo y cultural, y éste tendría que ser modificado por el Consistorio, que en ningún momento se hubiera prestado a ello.
El edificio del Consulado del Mar, sede de la Academia Provincial de Dibujo desde hace más de dos siglos, tiene, pues, trascendencia histórica y artística: no sólo es Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento desde el año 1995, sino que existe una íntima vinculación entre el edificio y su función, «dentro del imaginario burgalés, que lo convierte en uno de los valores añadidos a su interés histórico y artístico que se perdería con el cambio de uso del edificio», en palabras de María José Zaparaín, profesora de Historia del Arte de la Universidad de Burgos y vocal de la Comisión Provincial de Patrimonio de la Junta de Castilla y León.
En la Academia Provincial de Dibujo se formaron artistas de la talla de Marceliano Santa María, Mariano Pedrero, Luis Sáez, Felipe de Abajo, José Arija o Néstor Pavón, entre otros. En ella, además, han impartido docencia grandes maestros, como Isidro Gil, Evaristo Barrio, Luis Manero, Fortunato Julián o su actual director, Carlos Sáez. Casi nada. Desde su creación en 1796, no ha hecho sino dar lustre y esplendor, siendo cantera de artistas y gozando de una enorme reputación a nivel nacional.