Son varios los grafiteros de Burgos que aún tienen causas pendientes por pintadas en trenes, tanto en la provincia como en otros territorios. Tras la sentencia delTribunal Supremo, entre ellos se respira cierta inquietud que hasta ahora no habían sentido. Son conscientes de que se juegan la cárcel por dejar su sellos, no sólo en medios de transporte, sino en cualquier bien considerado de interés público. Para el abogado Guillermo de la Fuente, que representa a más de uno, los tribunales buscan acabar con lo que consideran un problema de vandalismo «a base de cañonazos».
«¿Cómo me van a meter en prisión por pintar?», es lo que se preguntan varios de estos grafiteros que a día de hoy tienen causas pendientes con la justicia, tanto en Burgos como en otras provincias, pues cabe destacar que esta actividad es itinerante. Entre el colectivo ha corrido como la pólvora el último fallo del Supremo y se confiesan temerosos.
De la Fuente critica que la administración «no sabe cómo afrontar la situación» y pretende castigarla con penas elevadas para así terminar con ella. Uno de sus últimos recursos presentados, de hecho, iba en esa dirección. Al respecto, argumenta que «para valorar la entidad de lo dañado siempre se ha cuantificado el valor del desperfecto, no sólo en el presente delito, sino en otros como el hurto».
De hecho, el ejemplo de proporcionalidad en la pena se ve precisamente con este tipo penal, cuando algunos juzgados han dejado claro que el hecho de acumular tres condenas anteriores por delitos leves de hurto convierta una multa en una condena que pueda conllevar los tres años de prisión, cuestión modificada hace unos años a nivel legislativo, resulta «desproporcionado».
«Lo que queremos es que se aplique el sentido común. El Supremo ha interpretado un artículo de una manera, pero en el ordenamiento jurídico caben otro tipo de lecturas. Creo que si los hurtos se condenan de una manera proporcional se debe aplicar del mismo modo los delitos de daños de grafitis en lugares públicos», concluye el abogado Guillermo de la Fuente.