Borja Jiménez cumple su primera temporada en el CD Leganés y en estas ocho primeras jornadas lo ha llevado a lo más alto de la clasificación. Hoy llega a El Plantío con una tarjeta de presentación espectacular, ya que solo ha perdido en uno de sus desplazamientos, en el feudo del Elche. 

Jiménez tiene muy claras las virtudes del Burgos: «Es un buen equipo y en su casa ha demostrado hasta hoy que es intratable, muy sólidos. En Valladolid tuvieron sus momentos para empatar antes del 2-0, también para hacer el 2-1. Los datos están ahí, pero han hecho méritos fuera de casa para sumar algún punto más. Jugar en casa es determinante para todos. Fuera de casa gana muy poquita gente, por eso hay que poner en valor cada punto que se consigue. La categoría está muy igualada y todos se hacen fuertes en casa».

El técnico prevé un partido diferente al que ganaron al Racing. Destaca que el Burgos «tiene un juego en largo peligroso, ahí se manejan bien. Para defender es diferente, porque no tendremos que defender igual y daremos algún matiz. Sabemos que nos vamos a encontrar esa peculiaridad y que a nivel de jugadores tienen muy buenas individualidades y son muy peligrosos».

También habló de Curro Sánchez: «Es una constante en su carrera el ser determinante en el balón parado, pero tienen más variantes que no jugaron el último partido y estarán frescos. El Burgos es un buen equipo y en su casa ha demostrado hasta hoy que es intratable».

Sobre su propio equipo, destacó que «cada vez vamos haciendo más cosas con pelota. Tener los extremos dentro nos permitió ser más asociativos, también con Cissé en la media punta. Es bueno crecer en todos los registros e ir mejorando. Cuando juguemos con dos delanteros cambiaremos las relaciones por dentro, pero tenemos que aprovechar los estados de forma y elegir a los mejores».

El entrenador del CD Leganés aseguró que «Arambarri y Miramón no van a llegar, el resto están todos disponibles y sanos. Con Aritz somos optimistas, veremos la semana, pero cada vez que nos falta algún jugador, el que entra lo hace igual o mejor, y eso es una bendición para el entrenador. Hemos tenido cinco días, que son los mismos que tuvimos entre Miranda y Santander».