La Policía Local realizó un total de cuarenta y ocho intervenciones por pintadas durante el pasado año. Dentro de estas actuaciones, en trece de ellas pudo identificar a los autores de los grafitis al pillarlos in fraganti o al tratar de darse a la fuga después de cometer el delito. A estas ocasiones, se les suman otras tres en las que no se pudo descubrir al autor, a pesar de que la pintada se había realizado en los momentos previos.

En el resto de las intervenciones, 32, la Policía manifiesta haber recibido la denuncia en horas posteriores a su realización, tanto en edificios de carácter privado como en   elementos patrimoniales del municipio. Según el cuerpo de seguridad, los autores escogen el espray para pintar en lugares como muros o fachadas, mientras que usan los rotuladores en escaparates, pilares, puertas y cierres comerciales o mobiliario urbano.

Con respecto a los materiales que se han incautado, los agentes contabilizan 93 botes de espray, 38 rotuladores Posca, dos botes de pintura y algunas herramientas para realizar las pinturas como rodillos, guantes o mochilas. A su vez, la Policía se ha hecho con otros elementos como picadoras de marihuana y prendas de vestir que, habitualmente, se utilizan para esconder la identidad, entre las que se encuentran pasamontañas y gafas de sol. 

Dos de los autores de las firmas han sido identificados a lo largo de 2024. El primero de ellos, con el seudónimo Kolsy había realizado al menos 69 firmas, mientras que el segundo, Vato, lo había hecho en unas 20 ocasiones.

La Policía Local ha explicado que las edades de los infractores oscilan entre los 13 y los 41 años. El 66% se encuentran entre los 14 y los 17, el 29% son mayores de edad y tan solo un 5% no superan los 13 años. Además, la mayor parte de las pintadas pertenecen a varones.

La Ordenanza reguladora vigente para la limpieza viaria y ornato público indica que "queda prohibido realizar inscripciones o pintadas en paredes, muros, columnas, quioscos, cabinas, fachadas, farolas, verjas, papeleras, contenedores, mobiliario urbano, etc". Las infracciones leves tienen una sanción económica de 750 € por pintada, sumando 100 € más por cada pintada adicional, hasta un máximo de 1.500?€. En los casos de infracciones graves, la sanción podría llegar a los 3.000 €. En los casos en los que se realice en un monumento o bien de interés cultural, se trataría de un delito contra el Patrimonio cultural y artístico