El Burgos CF jugará su próximo encuentro en una caldera. La Rosaleda estará a rebosar y alrededor de 30.000 aficionados blanquiazules empujarán desde la grada para que el Málaga certifique su permanencia y ponga el punto final a una campaña que comenzó mirando a los puestos nobles y en la que ha vivido al borde del abismo durante demasiadas jornadas.
El club andaluz no quiere dejar pasar la oportunidad de finiquitar el curso en su feudo y, según ha anunciado esta mañana 'no hay billetes', por lo que su estadio lucirá, de largo, la mejor entrada de la temporada.
El Málaga ha regalado un gran número de entradas a sus simpatizantes e incluso ofrece un 20 por ciento de descuento de cara al abono de la próxima campaña a los aficionados que acudan mañana al estadio. Quieren salvar la temporada como sea y ya cuadrarán cuentas en la próxima (...).
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