«Estamos incomunicados. Sin tren y con una estación de autobuses que da pena. Los viajeros que llegan de madrugada orinan entre los coches aparcados. La imagen que damos es terrible». Este fue uno de los ruegos que planteó un vecino de Aranda de Duero en el pleno ordinario que se celebró ayer en el Ayuntamiento. El alcalde de la capital ribereña, Antonio Linaje, hizo suyo este enfado y se mostró «muy indignado» con este panorama, así como con el recorte de líneas y frecuencias que sufre la terminal arandina durante los últimos años.
El regidor recordó que esta pérdida progresiva es competencia en unos casos del Gobierno central y, en otros, de la Junta de Castilla y León. «Se han reducido mucho los horarios de autobús a Soria y Segovia. A Zaragoza había tres al día y ahora quedan dos, y los fines de semana uno. De Galicia ya no vienen autobuses. Lo más lejos que llegan es a León, con uno al día». Además, para ir a Barcelona, según apuntó Linaje, la opción pasa por tomar un bus hasta Zaragoza y de ahí un tren «cuando hace unos años teníamos dos al día». Con Burgos y Madrid sucede algo similar. De hecho, Aranda tenía más conexiones en los años 80 que ahora. Pero no sólo eso. El alcalde recordó que esta situación resulta aún más grave en un momento en el que desde las administraciones públicas «se nos insta a utilizar el transporte público y a dejar el coche en casa. ¿Qué pasa? ¿Somos ciudadanos de tercera?», cuestionó al respecto.
En este sentido, Linaje detalló que ha solicitado una reunión con el presidente de la Junta de Castilla yLeón, Alfonso Fernández Mañueco, aunque ve más probable citarse antes con responsables de la Consejería de Movilidad para hablar de los espacios vacíos que hay en la estación de autobuses arandina. De hecho, desde hace tiempo sólo está abierto el bar. Ningún otro comercio. «Si la Junta no consigue alquilarlos, seguro que van a ser útiles para el Ayuntamiento», indicó.
En materia de infraestructuras, Linaje también se mostró indignado con el cierre de las dos estaciones de tren e invitó a todos los concejales a acudir a la concentración de este domingo en Robregordo. «Es muy importante que estemos todos allí, independientemente del color político. Aranda se juega el futuro», aseguró.
Más facturas. Una vez más, en el pleno ordinario de ayer se aprobó un reconocimiento extrajudicial de crédito por 89.664 euros para pagar las facturas correspondientes a la limpieza de las instalaciones municipales, ya que el contrato lleva caducado desde el pasado mes de junio. El nuevo se ha sacado hace unos días a licitación por 1.256.056 euros para los dos próximos años, con posibilidad de prórroga para otro ejercicio. Las empresas interesadas tienen hasta el próximo 18 de marzo para presentar sus ofertas.
En la sesión, vacía de contenido, la oposición criticó que no hubiera puntos de debate en el orden del día y acusó al equipo de gobierno de «opaco, poco transparente e incendiario», como manifestó la portavoz del PP, Cristina Valderas. Desde el PSOE, Ildefonso Sanz criticó que Linaje «antepone las liberaciones al Presupuesto».