La lluvia y el viento de las últimas semanas han provocado la caída de árboles en diferentes zonas de la ciudad como el paseo de la Quinta o el barrio de Cortes, pero preocupa especialmente el parque del Castillo, al ser un entorno muy transitado por paseantes con sus mascotas o los vecinos del entorno. Desde la Asociación del Casco Histórico Alto reclaman al Ayuntamiento una mayor vigilancia del estado de los ejemplares y limpieza de las ramas no solo del interior del bosque sino también de los más cercanos a la zona de viviendas, en las Eras de San Francisco.

Esta misma semana se ha caído un ejemplar de gran porte junto a la fuente de la encina, en la mitad de un camino muy transitado. Afortunadamente, se vino abajo cuando nadie pasaba por la zona y no hubo que lamentar heridos. «Es necesario llevar a cabo labores de limpieza y poda en el Castillo y una mayor vigilancia, especialmente de las zonas en las que hay árboles inclinados», indicó el portavoz de la organización vecinal, Francisco Bárcena. 

Preocupa especialmente la ladera de la calle Eras de San Francisco, donde pueden verse las raíces de los árboles por la pérdida del terreno en el que están plantados. «Es importante llevar a cabo limpiezas periódicas, de hecho desde el anterior vendaval no se ha limpiado nada, y especialmente de las laderas para evitar incendios».

El concejal de Medio Ambiente, Carlos, fía las actuaciones en el Cinturón Verde al nuevo contrato de conservación de parques y jardines que todavía no ha salido a concurso, de modo que tardará varios meses en entrar en vigor. Además, debido a la complejidad de este tipo de contratos, durante el proceso las empresas que concurren suelen presentar recursos por las puntuaciones y se puede dilatar su resolución. 

El contrato actual finaliza en mayo tras ser prorrogado de manera unilateral por el Ayuntamiento, de modo que a partir de ese mes las facturas se pagarán mediante reconocimientos extrajudiciales de crédito. El nuevo incrementará su coste para incluir la limpieza del citado Cinturón Verde, así como también los solares municipales y el Camino de Santiago. «Queremos esperar a tener el nuevo contrato para hacer una campaña de limpieza del Cinturón Verde», indicó. 

En anteriores mandatos se llevaban a cabo campañas de mantenimiento en estas zonas, retirada de plantas invasoras y árboles secos o limpieza de caminos con la contratación de brigadas forestales mediante los planes de empleo en colaboración con la Junta de Castilla y León, pero en los últimos años no se han convocado, lo que ha impedido hacer estos trabajos. De hecho, en el anterior mandato hasta se barajó la posibilidad de contratar brigadas forestales permanentes, pero finalmente no cuajó. 

El Cinturón Verde con el que cuenta la ciudad tiene 1.600 hectáreas, de las que 1.000 son municipales y el resto pertenecen a otras administraciones públicas (Junta y Diputación). Las parcelas que lo integran están repartidas por el Castillo, el cerro de San Miguel, Villatoro, Fuentes Blancas, Monte de la Abadesa, el campo de tiro de Villabilla o Río Vena. De hecho, hay un plan para su gestión que alcanza hasta 2031 y en el que se plantearon inversiones por 4 millones.