La Copa del Rey no se moverá de Aranda de Duero. La Arandina y el Ayuntamiento se reunirán hoy con el objetivo de aparcar las diferencias y comenzar a planificar la organización del duelo copero frente al Real Murcia. 

Entre las principales pretensiones de la institución blanquiazul, resalta todo aquello que pueda garantizar la seguridad de los asistentes. Ante la ausencia de un plan de evacuación formal, la directiva acercará posturas para poder garantizar, al menos, a corto plazo, la presencia de herramientas que eviten un percance mayor. Al no contar con dicho plan, una de las prioridades pasa por eximir al club de cualquier tipo de responsabilidad en caso de cualquier tipo de incidente por no contar con los medios necesarios.

Es decir, el club pretende que sea sobre el propio Ayuntamiento sobre el que caiga la responsabilidad. No obstante, aunque cumpla con los requisitos mínimos, la Arandina volverá a trasladar el mal estado del césped, así como vestuarios, bordillos dentro de la instalación o ciertos sectores de la propia grada. Entre ellos, el deterioro de diversos asientos, el estado de las cabinas de prensa o la posibilidad de incluir una red Wi-Fi en las mismas, con el fin de dotar de facilidades a las retransmisiones de los duelos en el Juan Carlos Higuero.

Por parte del Ayuntamiento, la idea firme desde un inicio siempre se ha mantenido en no mover de escenario un evento de la magnitud de la Copa del Rey. La propia concejala de Deportes, Belén Esteban, aseguraba hace unos días a DB que la propia Real Federación Española de Fútbol «había transmitido tranquilidad», así como afirmaba que «era totalmente falso» que Aranda pudiera perder la Copa (...).

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