Pasan los años, las legislaturas y los gobiernos municipales, pero el caos de tráfico en el barrio del G-3 no solo no se soluciona, sino que empeora. La Policía Local quiso 'meter mano' en los aparcamientos irregulares que anulan un carril por sentido, pero el anterior alcalde desautorizó al intendente jefe y evitó que al menos la medida coercitiva surtiese efecto. El actual ejecutivo municipal tampoco tenía esta cuestión entre sus prioridades -reconocido por varios concejales-, pero la muerte de una octogenaria el pasado mes de diciembre a causa de un atropello ha acelerado una posible intervención. De momento, el Ayuntamiento está en la génesis de un proyecto de rehabilitación de las principales calles, pero la intención a medio plazo es darle otro aire.
Hasta el momento las únicas medidas tomadas han sido meros parches que, solo hace falta darse una vuelta por el barrio, no han solucionado los problemas. Se colocaron señales y pintaron líneas para habilitar aparcamientos de motos en dos pasos de cebra, uno en Condesa Mencía y otro Victoria Balfé. El concejal de Tráfico, José Antonio López, aseguró que los 14 restantes de ambas vías correrían la misma suerte en una semana. Han pasado tres y siguen exactamente igual.
Lo curioso es que, tal vez por costumbre o simplemente por dejadez, son muchos los conductores que no terminan de entender que esas líneas blancas con la figura de un motorista pintadas en el suelo de las dos primeras plazas anexas a los mencionados pasos de cebra (en realidad sería una, porque el aparcamiento legal sería en línea), no permiten el estacionamiento de turismos. Sin embargo, es recurrente observar allí numerosos vehículos invadiendo un sitio que no les corresponde.
La medida, en cualquier caso, ya lo advirtió el edil delegado en la matera, era eventual hasta acometer una reforma mucho más «ambiciosa». Según ha podido saber este periódico, el primer borrador que llegó a las diferentes áreas implicadas era el de un proyecto que eliminaba un carril por sentido en las vías principales y dejaba una medianera habilitada para estacionamiento en línea. El informe de algunos técnicos, especialmente los de tráfico, fue demoledor. Era una vuelta atrás y no mejoraba la seguridad de los peatones.
La idea que barajan ahora, y que va cobrando forma aunque por el momento no haya nada definido, es mantener esa eliminación de un carril por sentido en Condesa Mencía y, probablemente, Victoria Balfé; aprovechar el espacio restante para el estacionamiento en batería legal y ampliar las orejeras de los pasos de cebra para hacer más visibles a los peatones. También se está estudiando la posibilidad de introducir alguna rotonda, pero eso ya supondría una obra mayor.