La Diputación y Cáritas afianzan su convenio en el medio rural

F. TRESPADERNE / Burgos
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Ambas instituciones firman un nuevo convenio para atender a personas necesitadas y desarrollar actividades en los veinte centros que la entidad diocesana tiene en la provincia de Burgos

Jorge Simón (i), director de Cáritas, firmó un nuevo convenio con el presidente de la Diputación, Borja Suárez. - Foto: Luis López Araico

«Las políticas sociales son nuestra bandera, nuestra absoluta prioridad», aseguró el presidente de la Diputación, Borja Suárez, en el transcurso de la firma de un convenio de colaboración, y van diez consecutivos, con Cáritas Diocesana, por importe de 32.960 euros, para que esta entidad continúe desarrollando diferentes programas a través de los veinte centros que tiene abiertos en el mundo rural.

Suárez agradeció la labor que desarrolla Cáritas en los pueblos y su compromiso, manifestando que la cuantía que aporta la institución provincial a este convenio va destinada a cuatro áreas de intervención, como son la de concesión de anticipos para prestaciones de urgencia social, formación ocupacional, impulso y apoyo a centros rurales de menores y jóvenes, y una última para ingresos en el albergue de Cáritas en Burgos. 

Además del convenio con Cáritas y con otras organizaciones para la prestación de servicios sociales, Suárez recordó que la institución provincial tiene firmados siete convenios por un montante próximo a los 550.000 euros, la Diputación para este ejercicio tiene una partida de 600.000 euros (el año pasado fue de 410.227) para ayudas de urgente necesidad, «partida de la que ya se ha gastado la mitad», matizó el presidente de la Diputación, quien no descartó incrementar la dotación si fuera necesario, aunque reconoció que la concesión de este tipo de ayudas «se ha ralentizado».

El director de Cáritas, Jorge Simón, tras agradecer la colaboración de la Diputación en la última década, destacó la «vocación» de Cáritas para atender al mundo rural, donde tienen más de veinte centros abiertos de manera permanente y atendidos por personal voluntario, técnicos y equipos parroquiales. En estos centros, matizó Simón, se atendieron el año pasado a 1.644 personas o 1.023 familias, además de 400 menores. 

«Con la Diputación compartimos preocupaciones comunes, como es el interés por la integración y apoyo a los colectivos en riesgo de exclusión», aseguró Simón, a la vez que matizo que además de la pobreza hay otras causas de exclusión como son la soledad o la falta de recursos públicos. Entre las ayudas a las que hace frente Cáritas, en coordinación con la institución provincial, son las de urgente necesidad o servicios funerarios, «ayudas, estas últimas, que nosotros podemos abordar de forma más ágil que la propia institución», afirmó Simón, que también declaró que una parte del apoyo financiero se destina a la realización de actividades es en la provincia. Entre esas actividades destacó las que «se hacen en nuestros centros de juventud, de los que estamos muy orgullosos, tanto en Lerma como en Villarcayo, y también de toda la tarea de formación ocupacional».