Quienes decidieron pasar el fin de semana en el refugio de Castro Valnera, entre Espinosa de los Monteros y Las Machorras, para disfrutar de la nieve o aprovechar el domingo para ver las espectaculares vistas y degustar un caldo caliente servido por Pilar Obregón, la encargada del mismo, se encontraron con una sorpresa. A última hora de la mañana no podían bajar con sus vehículos por la carretera BU-572 por la caída de un gran alud y no había otra salida.
Afortunadamente todo quedó en un susto y no hubo que lamentar ningún daño personal, dado que en ese momento no circulaba nadie aunque sí se vivieron algunos momentos de nerviosismo por parte de los excursionistas.
La avalancha se produjo sobre las 15 horas a la altura del kilómetro 4,5 cuando un gran bloque de nieve de 50 metros de largo y una altura de tres metros cayó sobre la vía. Inmediatamente desde el refugio avisaron al alcalde de Espinosa de los Monteros, Raúl Linares, que alertó a la Junta de Castilla y León, a la Guardia Civil de Medina de Pomar y a la empresa local Excavaciones Mikel.
Trabajadores de esta última subieron inmediatamente con una excavadora mixta. Tras hacer una evaluación de la situación procedieron a retirar la nieve. Posteriormente, llegó una fresadora de la Junta de Castilla y León para colaborar con los trabajos. Poco a poco se fue despejando la carretera después de tres horas de trabajo y los vehículos pudieron circular antes de que la zona se oscureciera.
(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)