Una operación conjunta, resultado de 18 meses de trabajo intenso por parte de las autoridades policiales, coordinada por Europol y liderada por las autoridades españolas y portuguesas, ha dado lugar a la desarticulación de una organización criminal especializada en el contrabando de tabaco que operaba con una infraestructura "altamente sofisticada" y que se ha saldado con nueve detenidos.

La operación ha contado con la participación de agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional de Salamanca, Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera (Agencia Tributaria), y de la Unidad de Acción Fiscal de la Guardia Nacional Republicana.

El modus operandi de la red criminal era altamente organizado y eficiente, ya que alquilaban camiones que eran utilizados para el transporte de hoja de tabaco comprada en Italia y una vez en España se realizaba el proceso de manipulación, picado, secado, envasado y preparación para su distribución.

La distribución se realizaba tanto con furgonetas alquiladas, hacia Portugal, como a través de empresas de mensajería a clientes de toda España. Este sistema, altamente móvil y flexible, se sumaba a que las naves de almacenamiento se mantenían en funcionamiento solo durante el tiempo necesario para el reparto, abandonándolas en un plazo de dos a tres días, tal y como ha señalado la comandancia de la Guardia Civil de Salamanca.

La red criminal disponía de una importante infraestructura y capacidad operativa, con propiedades en provincias como Salamanca, Zamora, Burgos, Valladolid, Madrid, Guadalajara y Écija, además de inmuebles en Portugal y Francia.

El pasado 16 de enero inició la explotación de la operación, y se han llevado a cabo de manera simultánea en España y Portugal 56 registros en distintos inmuebles ubicados en Salamanca, Zamora y Madrid, en territorio español y en Lisboa, Setúbal, Aveiro, Leiria y Portalegre, en el territorio portugués.

Estos registros han permitido desmantelar la infraestructura clave de la organización y se han incautado más de 6.5 toneladas de tabaco, 77.000 cigarrillos, 18 vehículos, abundante maquinaria para la manipulación del tabaco, y material electrónico, como ordenadores portátiles y teléfonos móviles.

De manera paralela se ha procedido a la detención de nueve miembros de la organización de diversas nacionalidades, entre ellas, española, paraguaya, portuguesa y venezolana, a quienes se les considera supuestos autores de los delitos de contrabando, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales, falsificación de documentos y fraude contra la Hacienda Pública.