Después de su expulsión definitiva del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Aranda, la concejal Virginia Martínez asegura que no conoce este movimiento de su excompañeros y, en un largo comunicado, elude pronunciarse sobre la exigencia a que entregue su acta en el Consistorio arandino para dejar paso a otro compañero de la lista. De hecho, afirma que en la reunión mantenida el miércoles en la sede del PP en Aranda «Cristina Valderas (portavoz popular) me expuso que iban a presentar un escrito en el Ayuntamiento como grupo municipal, del que desconozco los términos».
Martínez defiende en su escrito que el partido «era conocedor de que yo era presidenta de la Arandina CF» y que eso «siempre fue valorado de manera positiva». «Llevo cinco meses escuchado que se pretendía expulsarme del grupo municipal sin justificación alguna, sin que se me haya proporcionado ningún dato o argumento que lo respalde», reclama en su primera manifestación pública tras su expulsión del grupo del PP en el Ayuntamiento, donde insiste en que «tengo claro que los intereses generales del partido y de los ciudadanos están por encima de los pensamientos o creencias personales».