Ocurrió el pasado 4 de julio. Una mujer tomaba el sol en toples en la Deportiva -una práctica que se lleva realizando allí desde hace casi cuatro décadas- cuando un par de responsables militares le exigieron que se cubriera los pechos: «Me encontraba en el solarium donde algunas mujeres tomamos el sol con el torso al aire, como hacen todos los hombres desde siempre, cuando dos varones se han acercado a mí en una actitud muy invasiva y poco respetuosa para conminarme a que, cito literalmente, 'dejara de hacer toples'». La presencia de los dos hombres se debió a que ella hizo caso omiso de una advertencia previa de un trabajador. «Entiendo que es una cosa ya muy superada y que me lo pidan, un retroceso», indicó a este periódico.
Como castigo, se le ha sancionado con un mes de expulsión, decisión que no va a recurrir pero que considera «una discriminación absoluta». Este verano, en el boletín informativo que reciben los socios aparece el recordatorio de forma explícita de que es obligatorio (y lo pone en letras mayúsculas) «el uso de bañador completo (tanto masculino como femenino o bikini)», una advertencia que no estaba incluida en el de 2023.
El año pasado un grupo de mujeres contaron en este periódico su sorpresa, estupor y enfado porque se les había conminado en varias ocasiones a cubrirse los pechos y no entendían por qué se estaba produciendo esta situación ante un hecho que se lleva a cabo «con toda naturalidad desde hace muchos años» y que se desarrolla en un lugar específico, un solarium, que no está a la vista de la gente. En aquel momento pidieron que se les «enseñara dónde estaba aquello escrito». Ahora lo han encontrado en la página 15 del boletín informativo, en el apartado 'normas'.
«Es una decisión retrógrada que puede hasta conculcar el artículo de la Constitución que dice que somos todos iguales ante la ley», explica la afectada, que por un lado se muestra indignada pero, por otro, se ríe de una situación que le recuerda, dice, a «épocas pasadas». «En el escrito que les mandé les recordaba hasta la canción de Rigoberta Bandini en la que decía que no sabía por qué dan tanto miedo nuestras tetas. Me temo que a alguien le dan miedo o le provocan otro sentimiento tan negativo porque la dirección de la Deportiva asegura que se ha movido por la 'denuncia' de otras personas».
Desde la Oficina de Comunicación Institucional y Prensa del Ministerio de Defensa se ha indicado que la dirección del centro «ha obrado en todo momento en virtud de lo dispuesto en su Libro de Normas de Régimen Interior, así como de acuerdo a lo recogido en el Boletín Informativo 2024 que, como en cada campaña estival, se remite a todos sus usuarios a modo de recordatorio de las normas de convivencia». Pero no se ha permitido que este periódico pudiera entrevistar al director del centro, así que se queda sin respuesta una de las cuestiones que se plantea la usuaria: ¿Por qué después de tantos años de tolerar una práctica inocua ha habido este cambio de criterio?
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