La victoria de hace ocho días ante el Racing de Santander ha metido de lleno de nuevo al Burgos en la pelea por la sexta plaza. Por delante tiene ocho jornadas, ocho finales para lograrlo, en dura competencia con el Albacete y el Cartagena. Y la primera de esas finales la tiene hoy en El Alcoraz (14.00 horas) ante un Huesca muy fiable, sobre todo en su estadio, y que apura sus últimas opciones de mirar para arriba en la clasificación.

La alegría, ilusión y confianza han regresado al vestuario del Burgos con los tres puntos conseguido ante el conjunto cántabro. Y ese subidón anímico debe ser una de las principales bazas en Huesca. Por momentos el Burgos desplegó un juego brillante contra el Racing, liderado en el centro del campo por Mumo, que atraviesa su mejor momento desde que viste la camiseta del Burgos. Y en estos casos si algo funciona no parece lógico hacer grandes cambios. Y presumiblemente Julián Calero no los haga esta tarde. Podría repetir el mismo once ya que sigue sin tener a su disposición a Grego Sierra y Gaspar Campos. La fórmula de Pablo Valcarce, junto a Juan Hernández y Curro Sánchez dio buenos resultados. Sin embargo, Álex Bermejo acumula una semana más de entrenamientos y siempre que ha estado bien ha sido intocable para Julián Calero. Es una opción clara para la banda izquierda. Y también tiene sus opciones Castel, que lo hizo bien en los minutos que estuvo sobre el campo el pasado sábado.

Atrás es difícil que el entrenador toque nada y repetiría el sistema de tres centrales que permite a los laterales sumarse al ataque con mayor asiduidad.

El mayor problema que tiene el equipo burgalés es la larga lista de jugadores apercibidos de sanción: Matos, Atienza, Curro Sánchez, Raúl Navarro, Valcarce y Castel. Esta situación podría provocar cambios y que Calero reserve a alguno de ellos para la próxima jornada en El Plantío con la Ponferradina.

Mumo. Julián Calero tuvo palabras especiales para Miki Muñoz 'Mumo', jugador ahora mismo clave en el Burgos y al que considera un futbolista «diferente». «Conmigo juega mucho y está en su mejor año. Nos da mucho dinamismo en el centro del campo. Tiene que dar un paso adelante. No tiene límite su crecimiento físico y mental».

Enfrente estará un Huesca especialmente fuerte en su campo, aunque la suma de 16 empates le ha impedido mayores logros en la clasificación. Ahora mismo está centrado en sellar cuanto antes la permanencia, pero un par de victorias consecutivas le daría alguna opción de luchar por esa sexta posición.

Es un equipo parecido al Burgos en algunos conceptos, sobre todo en cuestiones defensivas, donde se muestra especialmente seguro. Y arriba cuenta con Obeng, delantero pretendido por el Burgos en diciembre pero que finalmente apostó por el Huesca.

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