La Comisión Territorial de Patrimonio Cultural, celebrada hoy 31 de octubre y presidida por el Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos, Roberto Sáiz Alonso, ha autorizado la ejecución de varias obras propuestas por el Arzobispado de Burgos. Entre ellas se encuentran la reintegración del fragmento del tapiz del siglo XVIi de la iglesia de San Juan de Castrojeriz, robado por Erik el Belga en 1980 y recuperado por la Policía Nacional a principios de 2022.
Los trabajos consistirán en la limpieza de toda la pieza, Apoteosis de las Artes Liberales, así como en la restitución del fragmento sustraído, con un angelote, y la colocación de un forro nuevo.
Asimismo, se ha acordado dar luz verde a la restauración del retablo del Calvario de la iglesia de San Esteban de Orón. El objetivo es solucionar los distintos problemas con los que cuenta, así como garantizar su estabilidad con el reintegro de solo aquellas estructuras que llamen la atención en su conjunto. La intervención cromática se limitará también a aquellas zonas que distorsionen la visión y tengan más protagonismo.
Otra de las iglesias en las que se va a intervenir es en la de Santa María La Real de Sasamón. En este caso se procederá a la restauración de la vidriera del presbiterio debido a los graves problemas de conservación con los que cuenta, causados por el deterioro del emplomado y de las estructuras metálicas. Los objetivos serán conseguir el control de las condiciones microclimáticas en las que se encuentra el ventanal, eliminar las sustancias susceptibles de alterar su conservación y mejorar la estabilidad de los elementos constructivos.
Por último, se realizarán obras de restauración en algunas de las vidrieras de la iglesia de Santa Eugenia de Villegas, así como la colocación de una reja practicable en la portada de los pies de la torre que permita la ventilación del interior. Las ventanas en las que se pretende intervenir presentan un estado de abandono, con la pérdida de vidrios en algunos casos y el deterioro en los sellados entre la piedra y la propia cristalera. La consecuencia es la infiltración del agua cuando llueve. Además, en el interior hay humedades en distintas zonas, la mayoría causadas por la condensación que se genera.
Todas las operaciones se ejecutarán respetando al máximo los criterios actuales sobre intervenciones en conservación curativa y restauración de bienes muebles Así, se prestará especial atención en cumplir con los principios de reversibilidad, mínima intervención y preservación del original. Asimismo, se respetarán las directrices generales sobre eliminación de adiciones históricas, prevención del 'falso histórico', preservación de la unidad estética de la obra y seguridad de los métodos y materiales empleados.