Los profesionales que trabajan en el hospital Santiago Apóstol contienen todavía el aliento dentro de la tercera ola de la pandemia. El centro cuenta con dos plantas prácticamente llenas de hospitalizados por el virus, se ha reducido la actividad quirúrgica y han cerrado en la medida de lo posible la asistencia al centro, para evitar el tránsito de personas y que el virus pueda entrar o salir. Pero no todo el mundo en esta pandemia tiene la misa visión. Así se ha podido comprobar en un vídeo difundido a través de las redes sociales en el que un varón accede «hasta la misma cocina y ver lo que se cuece», explica mientras recorre impunemente las instalaciones.
Su intención pasa por ‘demostrar’ que las autoridades mienten. «Aquí parece que hay gente pero no es para ser tan alarmistas. No veo a nadie correr de un lado para otro», relata el individuo. Así transita por la zona de consultas, entra en maternidad -donde le preguntan a quién busca- y posteriormente accede a una de las plantas en las que hay enfermos covid.
En ese punto se retira al ver que «aquí sí que parece que hay gente pero tampoco es para ser alarmistas». Ya en la segunda planta una de las celadoras del centro le detiene y le pide que se marche, aunque él defiende que «este es un hospital, un lugar público y puedo estar». Al final se va.
En la Consejería lamentan el hecho, aunque la mejor forma de contestar el mensaje afirman que es con los datos. La actualización de ayer del Santiago Apóstol, refleja que los hospitalizados por covid aumentaron a 39. Una de las representantes sindicales, Esther Quintero de Comisiones Obreras, critica la difusión de las imágenes en un momento complicado par los trabajadores. «Estar saturados no es que haya gente por los pasillos», apunta, ya que destaca que la imagen que se tiene que dar es la que se ve, sin gente en zonas comunes. Por eso tacha de «inconsciente e irresponsable» la grabación.