El nuevo Tubos Aranda de Javi Márquez celebra su primera victoria en liga. A base de orgullo y carácter, los arandinos suman los primeros dos puntos ante un Oviedo Unión Financiera combativo hasta el último suspiro (25-24). La bocina privó por cuestión de milésimas que el resultado hubiera culminado en reparto de unidades.
Le costó arrancar la maquinaria al Tubos Aranda. Un inicio cargado de imprecisiones y escasez ofensiva lastró en exceso a los amarillos, que fieles a su tradición fueron de menos a más durante la primera mitad. Tras iniciar por debajo en el marcador, los amarillos remaron hasta llevar la igualada al último cuarto de hora de encuentro.
No obstante, a partir del minuto 18 arrancaría el 'efecto Santiago Manguán'. El espíritu de la afición para llevar en volandas a los suyos surtió efecto y la delantera en el marcador se asentó en favor de los burgaleses. Al igual que la primera parte, un Joaquín Barceló en modo apisonadora y junto a él, el Pau Guitart que tanto necesitaba Aranda. Y de la euforia del momento dulce a la ansiedad del final. Milésimas separaron a Oviedo de lograr el empate sobre la bocina. El balón se coló en la portería de Pau Guitart, pero el colegiado consideró que fuera de tiempo.
25-24 en el marcador y primer triunfo del Tubos Aranda. Los ribereños salen del pozo y la mano de Javi Márquez se estrena en liga de manera inmejorable.