Los trabajadores del centro de tratamiento de Abajas y la empresa Cespa, que gestiona el vertedero perteneciente a la Diputación, han alcanzado un acuerdo laboral para los próximos cuatro años tras unos meses "muy duros" de negociaciones en los que hubo una huelga de la plantilla el 25 de mayo, así como paros parciales y movilizaciones dos veces a la semana para "dignificar" las "precarias" condiciones laborales a las que estaban sometidos los empleados.
El proceso de negociación iniciado en diciembre de 2020 ha culminado ahora con un pacto de mejora para los años 2021, 2022, 2023 y 2024 que recoge un incremento salarial del 14%, más lo que se eleve el convenio estatal durante el citado periodo, así como una reducción efectiva de la jornada laboral, además de otros aspectos sociales. Este preacuerdo ha sido aprobado en asamblea de trabajadores, informan desde el sindicato CGT.