La Comisión de Hacienda extraordinaria que los partidos de la oposición forzaron para que el equipo de Gobierno diera explicaciones sobre el intento de compra del edificio situado en el paseo del Espolón 30 no sirvió para aclarar las dudas que plantean sobre la operación sino para generar todavía más. La oposición afeó al alcalde, Daniel de la Rosa, y al concejal de Hacienda, David Jurado, que se reunieran con los dueños antes de iniciar el expediente. 

Cabe recordar que se iban a pagar más de 4 millones por un inmueble que los anteriores propietarios ofrecieron al Ayuntamiento de Burgos hace dos años y que, tras el silencio municipal a su oferta, acabaron vendiendo por 1,5 millones a la Sociedad Espolón 30 S.L. Tras la publicación hace dos semanas por este periódico de los pormenores de la operación y del expediente, la propiedad anunció que desistía y que emprendía un proyecto privado para el inmueble. 

Las explicaciones dadas ayer por los concejales de Patrimonio y Hacienda, Sonia Rodríguez y David Jurado, sobre la adquisición del edificio no convencieron a la oposición, máxime cuando a la sesión no acudió el técnico del área de Patrimonio que había realizado un informe de no idoneidad de la operación por estar de vacaciones.

El equipo de Gobierno reconoció que en 2020 la propietaria del edificio se lo ofreció el Ayuntamiento por 1,5 millones pero en el área de Patrimonio se desaconsejó la compra al considerar que tenía muchas cargas (inquilinos, okupas, contratos de arrendamiento...), pero no se hizo un informe como tal sino que se trasladó verbalmente a la concejala y se quedó en un cajón. En 2022 se retomó la posibilidad de comprar el bloque pero ya lo había hecho la Sociedad Espolón 30 S.L. en diciembre de 2021 por el precio inicial. 

Según explicó David Jurado se pidió en enero de este año al área de Arquitectura que hiciera una tasación del edificio, que fijó en 4,1 millones de euros libre de cargas. «Como ha dicho la funcionaria encargada del expediente todavía no se había iniciado la fase de negociación con los nuevos propietarios. La valoración era interna para saber cuánto dinero teníamos que poner en la modificación presupuestaria», señaló el edil (...).

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