El Burgos se agarró de nuevo al efecto Plantío y sumó su cuarta victoria de la temporada. Y lo hizo con un gol en la primera acción del partido, cuando apenas habían transcurrido 25 segundos de juego. A partir de ahí le tocó sufrir, y mucho, para contener al CD Leganés. Incluso cuando tuvo un hombre más por la expulsión de Cisse en el minuto 61, fue incapaz de cerrar el partido y acabó pidiendo la hora, en unos agónicos últimos minutos. 

Fue un duelo que quedó marcado por esa primera acción, por ese gol de Curro Sánchez en el primer minuto. Con el gol el Burgos cedió el mando del partido al Leganés en busca de alguna contra para incrementar su ventaja. Es cierto que tuvo un par de ellas, pero no las supo aprovechar y se agarró como pudo a su defensa durante la segunda mitad para guardar ese valioso tanto. Un gol que vale tres puntos muy importantes después de la dura derrota en Valladolid.

Jon Pérez Bolo introdujo novedades en su once respecto a las dos últimas citas. Navarro regresó al lateral derecho y Matos al izquierdo. Ander Martín y Dani Ojeda ocuparon las bandas, aunque a pierna cambiada, y arriba se colocaron Curro Sánchez y Fer Niño.

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