Mario Iceta, arzobispo de Burgos, ha instado hoy a las 10 exclarisas que abandonen el monasterio de Belorado después de que expresaran su voluntad de abandonar "libre y voluntariamente" la Iglesia Católica. "De no producirse una salida voluntaria en fechas próximas, los servicios jurídicos no tendrán más remedio que iniciar acciones legales", ha explicado. Eso sí, no se ha establecido un plazo concreto y ha hablado de que se realice voluntariamente, "a principios de julio".
Mientras, ha recordado que las propiedades e inmuebles son bienes eclesiásticos pertenecientes a los monasterios como entidades públicas eclesiásticas al servicio de la comunidad de clarisas que sigue habitando dichos espacios.
Pese a que José Ceacero, portavoz de las monjas, dijo que les tendrá que sacar del convento un juez, Iceta ha asegurado que el derecho conónico y el civil "sí tienen mucho que ver". Los acuerdos del Estado Español establece que la legislación conónica actúa como derecho estatutario en la capacidad de obrar de las entidades religiosas, por lo que en "ningún caso los bienes propiedad de los monasterios podrían pasar a ser considerados como meros bienes para disponer libremente de ellos".
Por otro lado, se ha avanzado que acudirán hermanas de otros conventos para cuidar a las cinco monjas mayores de Belorado. Eso sí, tampoco se ha aclarado cuándo ocurrirá o si se realizará mientras Ceacero y Rojas siguen allí. "Nos interesan las personas, no las piedras", ha comentado Iceta sobre lo que se puede demorar está situación en el tiempo. "La iglesia desea su regreso, yo rezo por ello", ha expresado Iceta, que confía en que las ya exclarisas puedan cambiar de opinión en algún momento.