Alain Guiraudie conquista la Espiga de Oro con 'Misericordia'

ICAL
-

La Espiga de Plata de la 69 edición de la Seminci recayó, ex aequo, en 'Polvo serán', de Carlos Marques-Marcet, que inauguró el certamen, y en 'Stranger Eyes', de Yeo Siew Hua

Alain Guiraudie conquista la Espiga de Oro con ‘Misericordia' - Foto: Leticia Pérez ICAL

El cineasta francés Alain Guiraudie se alzó este sábado con la Espiga de Oro en su primera participación en la Seminci gracias a 'Misericordia', su último largometraje, estrenado este viernes en las postrimerías de la 69 edición. La película, un cuento moral en torno al deseo y la necesidad, narra en clave de esperpento cómo el regreso de un hombre al pueblo donde creció trastoca por completo las vidas de cuantos allí residen. El jurado destacó del film, que además conquistó el premio Miguel Delibes al mejor guion, su «ligereza, que oculta un complejo equilibrio de géneros y tonos», y se refirió a la obra como «una profunda meditación sobre cómo el deseo y la culpa nos hacen predecibles y también incomprensibles los unos para los otros». Guiraudie vivió in situ la lectura del palmarés, y recibió la noticia brazos en alto con una gran sonrisa, aunque en esta ocasión los premiados de la Sección Oficial no compartieron sus primeras impresiones con los medios.

El reparto de premios incluyó además la Espiga de Plata, ex aequo, para 'Polvo serán', el drama musical sobre el derecho a una muerte digna de Carlos Marques-Marcet, que inauguró la edición nueve días atrás, y 'Stranger eyes', un thriller mutante en torno a la pulsión escópica dirigido por el joven singapurense Yeo Siew Hua, en su segunda concurrencia a la Seminci.

El jurado, integrado por la cineasta griega Sofia Exarchou, la actriz Aida Folch, el productor alemán Ingmar Trost, la crítica estadounidense Devika Girish y el director y escritor Luis López Carrasco, decidió otorgar el premio al mejor director al integrante de la sexta generación de cineasta chinos Guan Hu, por su conmovedora 'Black Dog', un cálido retrato humanista de redención ambientado en los prolegómenos de los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008, que también ganó el galardón a la mejor fotografía por su trabajo con «los paisajes, la luz y los encuadres».

Los premios de interpretación recayeron en el apartado femenino para la incontestable Laura Weissmahr, que carga sobre sus hombros con todo el peso de 'Salve Maria', el tercer largometraje de Mar Coll, que explora la oscuridad y los demonios interiores de la maternidad; y en el apartado masculino quienes se llevaron el gato al agua fueron Jan Gunnar Roise y Thorbjørn Harr, la dupla protagonista de 'Sex', la exploración en torno a los tabúes que rodean la pulsión sexual dirigida por Dag John Haugerud. Además, el jurado acordó realizar una mención especial a la pareja protagonista de 'Polvo serán': Ángela Molina y el chileno Alfredo Castro. 

En cuanto al montaje, el premio recayó en Telmo Churro y Pedro Filipe Marques, por su labor en la película 'Grand Tour', del portugués Miguel Gomes, que subvierte la estructura tradicional de los rodajes en un proyecto que, según explicó en Valladolid el director, se creó sobre la marcha, con los guionistas adaptándose al material que se había rodado previamente. 

premio del público. Además, el premio del público de la Sección Oficial recayó, como era de esperar, en la norteamericana Tracie Laymon por 'Bob Trevino Likes It', la conmovedora historia de cómo la propia directora encontró un apoyo vital en un hombre que compartía nombre con su padre ausente, a quien conoció por casualidad en Facebook. El premio Fipresci, que otorga la crítica especializada, fue en esta ocasión para 'Christmas Eve in Miller's Point', de Tyler Taormina, que refleja en clave de cuento coral navideño la alienación que impregna la cultura estadounidense. Ese fue el único galardón que recibió ciertos pateos durante la lectura, que por lo general fue recibida con aplausos. La Espiga Verde, a la obra que mejor promueve valores medioambientales, fue para 'Caught by the Tides', del maestro chino Jia Zhang-ke, mientras que la Espiga Arcoíris fue para la rumana 'Tres kilómetros al fin del mundo', que ya tiene en su haber la Queer Palm tras su estreno mundial en el Festival de Cannes.

En cuanto a los cortometrajes, la Espiga de Oro, fue para 'Baldilocks', la dolorosa mirada íntima a su propio pasado de la cineasta belga Marthe Peters, y las dos Espigas de Plata fueron para 'Punter', de Jason Adam Maselle, y 'Lluna de sal', de la barcelonesa Mariona Martínez. La directora comentó que exhibir su trabajo en Seminci ha sido «una oportunidad muy grande» para una película que es su trabajo de final de grado. «Es muy emocionante», apuntó.

Además, en la sección oficial de cortometrajes españoles, el premio La Noche del Corto Español fue para 'El príncep', de Alex Sardà, con una mención especial para 'De sucre', mientras que el mejor cortometraje europeo fue 'O', del islandés Rúnar Rúnarsson, y el premio Castilla y León en Corto recayó en el vallisoletano Alejandro Renedo (que ya conquistó el galardón en 2020 por 'De perfil'), esta vez por 'Solo los muertos se quedan', que calificó como "un corto que habla de la importancia de los otros, aun cuando están ausentes".

El director de la Semana Internacional de Cine de Valladolid, José Luis Cienfuegos, aseguró tras la lectura del palmarés que cierra esta edición «con satisfacción y autocrítica», además de apuntar que, para los organizadores, «la exigencia es absolutamente irrenunciable».