Nueva remesa de cartas con la Junta de Castilla y León como remitente y el Gobierno de España como destinatario. Cuarenta y ocho horas después de que los nuevos ministros tomaran posesión de su cargo, el presidente autonómico ha anunciado que prepara una oleada de misivas a casi todos los nuevos titulares ministeriales para ponerse mano a la obra con proyectos «vitales» y «largamente demandados» por la Comunidad. El consejero portavoz, Carlos Fernández Carriedo, fue el encargado de anunciar esta iniciativa con la que la Junta espera que el Gobierno de España tenga, al menos, el «mismo interés» con el que atiende las demandas de los partidos «separatistas». «Nuestras necesidades y demandas no tienen menos importancia que las suyas». Sin detalles todavía de que proyectos o ministerios serán los que recibirán estas cartas, Fernández Carriedo reconoció que se trata de materias «que todos tenemos en la cabeza», y se limitó a señalar los soterramientos del ferrocarril en León, Palencia y Valladolid.
«No se va a pedir nada que sea irrealizable y no se va a pedir nada que no sea necesario para nuestra comunidad autónoma y por tanto nos centramos en aquello que es realizable y que es necesario». Las misivas, continúo el consejero portavoz, se remitirán con un «espíritu constructivo» para abordar asuntos que «afectan directamente» a Castilla y León. «Se tratarán proyectos de interés común y la intención es colaborar para que salgan adelante». Fernández Carriedo quiso dejar claro que no habrá excentricidades en las peticiones autonómicas, y que primará el «interés general». «A diferencia de los acuerdos firmados con los partidos separatistas, aquí prima el interés de Castilla y León, y beneficia a la gente de Castilla y León».
El portavoz reseñó que las misivas no alcanzarán a la totalidad de los 22 ministerios, y aseguró que se remitirán a los responsables de las carteras que tienen «más relación directa» con la Comunidad. «Lo que es bueno para Castilla y León, también es bueno para España». Más allá del apartado de infraestructuras, Fernández Carriedo también citó otras reclamaciones históricas del Ejecutivo autonómico como la prueba única de acceso a la universidad; la ampliación de la oferta de formación especializada de profesionales sanitarios, con el objetivo de incrementar las plazas MIR (Médico Interno Residente); o que también no se deje fuera a graduados y que establezca una prelación en cuanto a los destinos, o se agilice la convalidación de títulos extracomunitarios.
Decisiones desde Waterloo
El consejero portavoz también aprovechó el anuncio del envío de misivas para volver a arremeter contra los pactos de Gobierno de Pedro Sánchez. En este sentido lamentó que, a su juicio, tendrá «más peso» lo que se decida en Waterloo –en referencia a la ubicación donde reside el expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont– que lo que acuerde el Consejo de Ministros. «Es una pena que en democracia quien mande sea un fugado de la justicia, perseguido por terrorismo y corrupción». Tiró de ironía Fernández Carriedo para aseverar que, muchos de los proyectos e infraestructuras que reclama Castilla y León «estarían muy encauzados» si hubieran ido a pedirlo a Waterloo o Suiza. Más allá de la crítica política, el portavoz de la Junta reconoció que tiende la mano al Gobierno de España «siempre que sea para el bien de Castilla y León».