La consejera de Educación, Rocío Lucas, defendió hoy la "calidad" del servicio de los comedores escolares, que apuntó se presta a través de la línea fría desde hace 14 años, y añadió que la alimentación de los niños es una "prioridad" para la Junta, mientras el procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández, denunció que la "vorágine privatizadora" del Gobierno autonómico arrase por encima de los derechos de los alumnos.
En la sesión de control del pleno de las Cortes, Lucas respondió a una pregunta del parlamentario 'morado' en la que denunció que el único impulso que han dado es para "privatizar los comedores escolares, de forma que acusó a la Junta de transformar los derechos "en negocio". Además, criticó la línea fría que prestan, dijo, las mismas empresas de catering, "muy cercanas al PP", en lugar de contar con cocinas en los colegios que compren productos de proximidad que favorezca la economía circular.
La consejera, por el contrario, aseguró que el servicio de los comedores es "complementario" y añadió que garantiza el servicio educativo y la conciliación, al tiempo que defendió la apuesta de la Junta con "más comedores y más usuarios", la mayoría -apuntó, con ayudas y otros con la gratuidad total. De esta forma, indicó que la gestión es la "adecuada" porque además ofrece los "mayores estándares de calidad" y garantiza la "equidad".
"A ustedes lo único que les interesa es el negocio, el lucro y el enriquecimiento empresas privadas de catering sirven comida fría, que deja mucho que desear, cuando no lleva larvas de gusano o tuercas", dijo Pablo Fernández, si bien la consejera de Educación le respondió que la línea fría ofrece la mejor garantía higiénico-sanitaria, como recordó indican los expertos.