La Fiscalía de Burgos ha archivado las diligencias practicadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) en relación a la tala de árboles del Parral llevadas a cabo dentro de las obras de remodelación de este espacio impulsadas por Patrimonio Nacional. El fiscal ha concluido que del informe no podía desprenderse la existencia de indicios de delito medioambiental y, por lo tanto, el procedimiento concluye en este punto y no se remitirá al juez. 

Ya en su informe el Seprona había puesto de manifiesto que la intervención sobre los árboles no afectó a la fauna ni, mucho menos, a especies protegidas. Es decir, que no se habían producido daños irreparables ni en el entorno ni en los animales. Cabe recordar que la intervención en el Parral se inició el 21 de mayo con el cierre de las puertas y días después se inició la corta de los ejemplares en mal estado que se habían señalado en el proyecto que el organismo estatal presentó para la obtención de licencia. 

Sin embargo, desde el Ayuntamiento se remitió un escrito a Patrimonio Nacional en el que mostraba su «disconformidad» con la tala de 32 árboles de «gran interés ecológico y paisajístico, cuando los informes técnicos solicitaban su conservación y cuando desde la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural de la Junta se fijaron una serie de consideraciones, entre ellas que solo se eliminaran los ejemplares «estrictamente indispensables por razones de seguridad». Además, alegaban que hacer la tala en esta época tenía una repercusión negativa para las aves.

El revuelo fue tal que se personaron en el lugar hasta en dos ocasiones agentes del Seprona para comprobar los trabajos y emitir un informe. Ante esta situación Patrimonio Nacional decidió parar la tala el 5 de junio con el objetivo de solicitar un nuevo informe sobre el estado de los ejemplares a la Escuela de Montes de Madrid para saber cómo proceder pero del que por el momento nada se sabe. 

La institución siempre ha defendido que los trabajos de corta de 107 árboles de los 1.000 que tiene el parque estaban contemplados en el proyecto que fue consensuado con el Ayuntamiento y basado en un informe realizado por técnicos de la Escuela de Montes de Madrid y en el Plan Director del Parral debido al riesgo de caída que suponían para los usuarios del parque y, además, está previsto plantar 407 árboles y 4.000 arbustos. «La prioridad para Patrimonio Nacional es la seguridad de todas las personas, los usuarios del parque y los trabajadores de la obra», indicó la institución en ese momento.

Durante este tiempo la adjudicataria se ha centrado en otros trabajos contemplados como el acondicionamiento de los caminos.