Cualquier actuación urbanística o de instalación de servicios que se lleve a cabo en el casco histórico tiene que ir precedida de una excavación arqueológica. La obra iniciada para cambiar los contenedores soterrados o subterráneos con el objetivo de mejorar su estética y funcionalidad no ha sido una excepción. Los trabajos previos a la colocación de la estructura que acogerá la isla completa de todas las fracciones de residuos en la calle San Esteban ha sacado a la luz restos de los muros de las casas medievales, varios silos y cerámica.
Los trabajos, dirigidos por la arqueóloga Fabiola Monzón, se han iniciado esta semana y se prolongarán durante unos días más para poder documentar todos los restos. En la zona ya se hizo un sondeo en 2011 cuando se ubicaron los anteriores contenedores y ya aparecieron restos del barrio medieval y que luego se mantuvo hasta el siglo XIX cuando se fueron los franceses. La retirada de todos sedimentos de la parte superior para llegar a la cota de base, donde han aparecido restos, ha sido costoso y ha contado con maquinaria que ha aportado Herrero Temiño, empresa a la que se adjudicó la instalación.
«Debajo del muro de contención había un cimiento de hormigón que se ha retirado para poder excavar. Han salido muros de viviendas. También ocho silos, como los de La Llana de Afuera, aunque hay uno cubierto de yesones y otros están excavados directamente en un relleno, no en el terreno natural», apuntó la arqueóloga.
Los trabajadores de Herrero Temiño, empresa adjudicataria, han retirado toneladas de sedimentos para que los arqueólogos puedan realizar los estudios. - Foto: ValdivielsoTambién han aflorado algunas cerámicas del siglo XIII que están cubriendo los silos y estos días se trabajará en un relleno datado en la Edad Moderna en el que se han hallado piezas de cerámica del siglo XVI. La excavación se ha limitado a 2,60 metros de ancho por 16 metros de largo, que es el espacio que ocupará la infraestructura para los contenedores. «Sabemos que sigue habiendo restos más allá, pero la empresa hará un muro de contención y la zona que se preservará cubierta con geotextil», añadió.
Con todos restos y documentación que se recoja en la excavación, la arqueóloga realizará una informe que aportará datos sobre las características del barrio. «Sabremos más sobre la distribución de las viviendas y del urbanismo. Será muy interesante. En la zona de arriba han aparecido algunos quemados que podrían relacionarse con la Guerra de la Independencia y también alguna bala».
El trabajo tiene un gran interés para conocer más sobre la distribución del caserío medieval y la organización de los hogares de la época. Cabe recordar que Monzón también ha excavado en Las Llanas previamente a la remodelación que se realizó en el entorno. Antes de que se taparan se realizaron visitas guiadas, así como también en la iglesia de San Román, en las laderas del Castillo. Recientemente, se ha realizado por parte de otro arqueólogo la excavación en la muralla más próxima a la calle Álvar Fáñez donde se quiere ubicar un aparcamiento.
Proyecto. El proyecto de sustitución de los contenedores soterrados ya contemplaba la realización de los trabajos arqueológicos en diferentes puntos por estar afectados por el Plan Especial del Centro Histórico (PECH) con el objetivo de aflorar el grado de conservación de las evidencias y la entidad de las mismas y poder plantear cualquier medida correctora que se considere necesaria en el caso de que dichos vestigios se puedan ver afectados por el proyecto constructivo.
En el caso de los contenedores de la calle San Esteban se desplazará su localización respecto a los actuales para permitir una recogida más cómoda y adecuada para el camión. Además, se incorporará un buzón más para vidrio, conformando una isla soterrada completa (papel y cartón, plásticos, materia orgánica, resto y vidrio).
La renovación fue adjudicada a Herrero Temiño por 1.203.747 euros y un plazo de ejecución de seis meses. Urge la terminación de la obra a finales de este año al contar con financiación de fondos europeos (250.000 euros). Está previsto eliminar los contenedores que actualmente se encuentran en la plaza del Cid, Plaza Vega y Sombrerería, dada su antigüedad y los de la plaza del Rey San Fernando para mejorar la estética del entorno de la Catedral. También se suprimirán los de San Juan y Cordón con el propósito de reubicarlos en una isla completa entre Hortelanos y la avenida del Cid, con mejor acceso para los vehículos de recogida.
Se unificarán las islas de la calle Laín Calvo disponiéndolas en una sola completa y se desplazarán los contenedores de Alonso Martínez, acercándolos a la estatua de la Mujer del Paraguas para reducir las maniobras que ahora tiene que hacer el camión de recogida y en Nuño Rasura se cambiará el buzón de vidrio por uno de papel y se reubicará junto a la bancada de 'Bicibur', entre otras novedades.
Los trabajos, que arrancaron el mes pasado y que se desarrollan a buen ritmo, ya se ha eliminado una de las dos posiciones de contenedores soterrados antiguos del paseo de la Audiencia al ser muy complicada su recogida y se ha completado la isla en superficie de la calle Eduardo del Campo para poder recoger en este punto todas las posibles fracciones de residuos.
Finalmente se quitarán los de la plaza de los Castaños para completar la isla de soterrados que funciona en la calle Fernán González número 36 y también los del suroeste de la Plaza Mayor para completar la isla existente en el extremo noroeste de la misma.