La programación de fuegos artificiales para las fiestas de San Pedro y San Pablo reservará una traca final al margen de las cinco sesiones en el puente de Castilla, previstas para los días 27, 28, 29 y 30 de junio y el 2 de julio, con una duración de 12 minutos cada una.
La Concejalía de Festejos de la Gerencia Municipal de Cultura ultima los detalles relacionados con un evento piromusical que se celebrará el día 3 de julio en el entorno de la avenida de la Constitución y la rotonda del peregrino. Una actuación que servirá de cierre de las fiestas de 2024 en el que será el estreno de su formato reducido de la programación.
La compañía madrileña Vulcano representará en el barrio de Capiscol un espectáculo con sello propio que cautivó a la delegación del Ayuntamiento de Burgos desplazada a la ciudad de Valencia en las recientes Fallas. "Es algo completamente diferente a lo que hemos visto hasta ahora. Pensamos en reproducirlo en Burgos y queríamos llevar a esta zona de la ciudad algo especial", explica la concejala responsable, Carolina Álvarez.
El Ayuntamiento invertirá 38.000 euros en esta actuación novedosa en la ciudad, ya que será necesario que la compañía desplace aparte de su personal para la correcta celebración del programa previsto. Esta cantidad se une a los 100.000 euros presupuestados para el mencionado calendario de fuegos artificiales.
Representantes de Vulcano ya han visitado Burgos en las últimas semanas para reconocer sobre el terreno las características del recorrido ideado, mientras que la administración local ya cuenta con el visto bueno de los técnicos de Cultura, Bomberos y Protección Civil para concretar las medidas de seguridad necesarias. El público presente permanecerá estático en su ubicación y podrá seguir el espectáculo con normalidad.
Si bien quedan algunos aspectos por concretar, como el horario y el recorrido definitivo, el evento se celebrará al caer la noche después de que las peñas hayan regresado a sus respectivos puntos de origen finalizada la bajada de los toros. El fuego y la luz serán los principales elementos de una iniciativa dinámica que también contará con una coreografía de baile que, se espera, tenga protagonismo burgalés.
50 kilos de pirotecnia. Demonios, hadas, animales mitológicos, castillos de fuego y otros atractivos visuales darán paso a la explosión de luz, color y sonido que cerrará la actuación considerada como la traca final. Para ello, la compañía Vulcano utilizará 50 kilogramos de material pirotécnico que pondrán la guinda a la programación de los Sampedros. "Entra dentro de la categoría de espectáculo piromusical, pero lo cierto es que hemos importado algo que no dejará indiferente a nadie", zanja la concejala de Festejos.