p.c.p. / burgos
Ya es oficial. La obra de construcción de la presa de Castrovido ha terminado, después de casi 17 años de ejecución y múltiples avatares, incluido un gravísimo accidente laboral que costó la vida a 4 trabajadores en 2011. La Confederación Hidrográfica del Duero ha confirmado a este periódico que los trabajos han finalizado en diciembre, tal y como estaba previsto en el último de los plazos oficiales facilitados, y que su intención es iniciar la fase de llenado y puesta en carga de embalse «antes del fin del presente invierno».
Sin embargo, la CHD no está en condiciones de definir aún un calendario de llenado, por cuanto depende primeramente de las aportaciones naturales a la cuenca (precipitaciones de lluvia y nieve). Además, queda pendiente que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico formalice el contrato de conservación, explotación y mantenimiento de la presa y el azud de Los Vados durante su puesta en carga. La UTE formada por Alauda y Auscultación y Taller de Ingeniería fue elegida hace más de un mes entre las 7 ofertas presentadas, al ser la más económica y la mejor valorada técnicamente. La adjudicación, que aún no se ha formalizado, se produce con una baja del 44,2% respecto al presupuesto de licitación y al límite de la temeridad (por menos de 10.000 euros no ha incurrido en ella la ganadora). Finalmente, estos trabajos le costarán al Estado 363.791,81 euros (más IVA), frente a los 651.956,65 que había estimado en el pliego.
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