El malestar del PSOE con el uso que el equipo de Gobierno está haciendo de las redes sociales institucionales del Ayuntamiento es patente. Pero la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de la oposición no tiene que ver tanto con la cuenta municipal de X (antes Twitter) -que también- como con las de correo electrónico. El lunes por la tarde llegaba una nota de prensa a los medios desde el email del departamento de comunicación del Consistorio en la que se afeaba a los socialistas «los desaguisados» heredados de su gestión en materia de movilidad, un comportamiento que Daniel de la Rosa considera «inaudito y totalmente inadmisible».
Son las palabras que utiliza el líder del grupo municipal socialista en la proposición que su formación llevará al Pleno del viernes, en la que exigirán que «las cuentas oficiales del Ayuntamiento en redes tengan una finalidad puramente informativa o divulgativa, sin que quepan mensajes u opiniones políticas». Algo que también pedirá que se haga extensible a las cuentas de correo del Consistorio. «Las cuentas vinculadas a los propios grupos políticos pueden trasladar cuantas críticas considere cada formación contra sus adversarios políticos, pero una cuenta institucional jamás debiera hacerlo ya que nos representa a todos los grupos políticos municipales del Ayuntamiento y al resto de la administración», señala el texto de la propuesta socialista.
La proposición agrega que «en un sistema democrático es esencial la comunicación entre la administración y los administrados, pero esta no se puede distraer hacia fines partidistas, ni mucho menos utilizarse premeditadamente como instrumento de propaganda». Según el cálculo del PSOE, «más del 70% de las publicaciones entre octubre y noviembre por la cuenta del Ayuntamiento en X fueron meramente propagandísticos, lo que evidencia el flagrante incumplimiento de la ley». «La emisión de 152 mensajes destinados únicamente a ensalzar la labor del equipo de gobierno actual sobrepasa la buena fe que debería regir el funcionamiento de una cuenta institucional», reseña.
La «misma situación», denuncian los socialistas, «se reproduce en Instagram, plataforma dirigida hacia los contenidos audiovisuales, donde 32 de las 39 publicaciones realizadas en el perfil del Ayuntamiento de Burgos durante este periodo de tiempo están protagonizadas bien por la alcaldesa o bien por el resto de corporativos de PP y Vox».
Estas cifras, según los socialistas, «demuestran un uso completamente arbitrario de unos canales públicos que deberían de estar a disposición de los ciudadanos y no de dos partidos políticos». De la Rosa advierte de que «se debe respetar la pátina de seriedad y neutralidad que confiere un canal institucional, ya que la existencia de perfiles privados o el correspondiente a un partido político ya se encargan de trasladar la lógica parcialidad de la información».
Los socialistas recuerdan que el equipo de Gobierno utilizó unas pintadas en la vía pública en las que ponía «PSOE traidor», que vandalizaban varios contenedores en la vía pública y distintos locales comerciales en comunidades de propietarios, para ilustrar una de las campañas de limpieza y retirada de grafitis que el servicio municipal de sanidad y medio ambiente realiza varias veces al año. Un hecho que a su juicio revela «un cinismo absoluto en el gabinete de comunicación municipal», que pudo usar cualquier otro grafiti.