Castilla y León registró 10.016 nacimientos de empresas y 11.452 muertes durante el año 2022, lo que arroja un saldó negativo para el tejido productivo de la Comunidad de 1.436 actividades, frente a una variación neta positiva en España en 1.726. (301.406 creaciones frente a 299.680 desapariciones).
La desaparición de empresas se correspondió mayoritariamente con las que carecen de empleados, 8.097, seguidas por las 3.223 de uno a cuatro; las 110 de cinco a nueve, y las 22 con diez o más. Nacieron, por el contrario, 7.584 sin empleados; 2.299 con entre uno y cuatro; 107 con entre cinco y nueve y 26 con diez o más.
El dato se recoge en la Demografía Armonizada de Empresas publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), donde se precisa que la tasas de nacimientos se situó en la Comunidad en el 6,4 por ciento, por debajo del 8,6 por ciento de la media nacional; y la de muertes, en el 7,3 por ciento, cuando en España fue del 8,6 por ciento. La tasa neta de la Comunidad fue de -0,9 puntos, mientras en el conjunto de las autonomías se situó en 0,05.
Atendiendo al territorio donde tenían su sede las empresas, Illes Balears y Canarias (10,8 por ciento ambas) y la ciudad autónoma de Melilla (10,2 por ciento) presentaron las mayores tasas de nacimientos en 2022. Por el contrario, las tasas más bajas se dieron en La Rioja (5,8 por ciento), Castilla y León (6,4 por ciento) y Comunidad Foral de Navarra (6,6 por ciento).
Por su parte, las mayores tasas de muertes de empresas se registraron en las ciudades autónomas de Melilla (11,5 por ciento) y Ceuta (10,5 por ciento), y en Comunitat Valenciana (9,3 por ciento). Y las menores, en Comunidad Foral de Navarra (6,9 por ciento), País Vasco y Cantabria (7,1 por ciento ambas).
El informe, recogido por Ical, revela que el stock empresarial se situó en la Comunidad el ejercicio de estudio en las 156.230 actividades, un 0,4 por ciento más que en 2021, cuando los nacimientos y defunciones arrojaron un saldo positivo de 616. La mayor parte de las empresas de la Comunidad, 83.230 carecía de empleados, 57.834 contaba con entre uno y cuatro; 8.324 con entre cinco y nueve; y 6.673 con diez o más trabajadores.
Cabe destacar que dentro del stock empresarial, destacaron por su número las 22.453 empresas de comercio al por menor; las 14.697 de servicios de comidas y bebida; las 12..275 de construcción de edificios; o las 6.667 de actividades inmobiliarias.