La ampliación del Museo de Burgos es uno de esos temas que han dado que hablar. Hace un año parecía que estaba condenada al olvido hasta que en octubre de 2023 el consejero de Cultura de la Junta de Castilla y León, Gonzalo Santonja, declaró que el proyecto se iba a ejecutar aunque con un modificado. Siguiendo sus palabras, el delegado territorial de la Junta en Burgos, Roberto Saiz, confirmó ayer que se está llevando a cabo una actualización de costes, así como una reordenación de los espacios para poder realizarse.

Al hablar del tiempo estimado para el inicio de las obras, Saiz añadió no poder establecer unos plazos exactos, dado que a estos pasos de reorganización se tiene que sumar la tramitación administrativa ordinaria. Algo que sí quiso remarcar es que «existe un compromiso claro de la Junta con esta ampliación».

El delegado territorial destacó que no se han producido avances desde que Santonja garantizó, el pasado año, haber acordado con el presidente del Ejecutivo autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, que iba a contar con partida presupuestaria, procedente de fondos extraordinarios.

La intervención prevista consiste en ampliar el museo con la construcción de un edificio de tres plantas más sótano de 2.800 metros cuadrados en el solar de la Casa Melgosa. En su día se habló de que sería necesaria una inversión de entre tres y cinco millones de euros, aunque esos precios están pendientes de actualizar.

Cabe recordar que el inmueble es de titularidad estatal, pero la Junta de Castilla y León decidió colaborar en la mejora de sus instalaciones y sufragó la redacción de un plan director para actuar en varias fases. Posteriormente convocó un concurso para diseñar el edificio de nueva construcción en la Casa Melgosa. El estudio BHER ganó la licitación y elaboró el proyecto básico. La Comisión de Licencias del Ayuntamiento dio luz verde al mismo en marzo de 2020 con una serie de sugerencias. A finales de 2022 la Junta renunció a la licencia y deberá pedir otra.