El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Soria mantiene la medida cautelarísima instada por el partido animalista Pacma contra la celebración del Toro Jubilo de Medinaceli (Soria) y rechaza así las alegaciones presentadas por la Junta y el Ayuntamiento de Medinaceli contra la resolución.
En su escrito, contra el que cabe recurso de apelación, el magistrado vuelve a recordar que considera «digno de mayor protección la integridad física, el bienestar y la vida del animal» frente a la celebración tradicional, que estaba prevista para hoy, 16 de noviembre.
Como argumenta el juez, el elemento tradicional, la tradición y determinados ritos «no pueden alzarse como un valladar infranqueable de la consideración actual de los animales como seres sintientes» y su debida y legal protección por la normativa europea y española.
En respuesta a las alegaciones tanto del Ayuntamiento de Medinaceli como de la Junta, el escrito subraya que el juzgado «estimó la medida cautelarísima instada por Pacma apreciando en primer lugar la premura de tiempo que concurría, con un festejo señalado para celebrar entonces a cuatro días hábiles, y ahora a apenas dos días, poniendo de manifiesto también que todas las partes de este proceso han demorado en notable exceso toda resolución», según explica Efe.
El Juzgado Contencioso Administrativo de Soria rechaza también el «peculiar argumento» expuesto por la Delegación de la Junta al afirmar que dicha sentencia «no es firme» y que está aún pendiente la resolución de los recursos de apelación presentados por la Junta y el propio Ayuntamiento.
En conclusión, este auto ratifica la suspensión de la celebración del Toro Jubilo de este año hasta que haya una sentencia firme que decida si la suspensión es definitiva, como pide Pacma, o puede retomarse su celebración.
Concentraciones.
Tras la suspensión, el municipio será el epicentro este sábado de dos concentraciones de posturas contrarias, taurinos abanderados por la Asociación del Toro Jubilo y antitaurinos convocados por Pacma, un escenario de tensión para el cual la Subdelegación del Gobierno ha preparado un dispositivo de seguridad especial con guardias civiles «suficientes» con el fin de evitar conflictos entre ambas partes.
Después de suspender el Toro de la Vega en Tordesillas, los vecinos de Medinaceli eran conscientes que su fiesta más popular, el Toro Jubilo, era objetivo de los animalistas. Este festejo está desde hace décadas en la diana de Pacma que denuncia que el toro embolado que se celebra durante las fiestas sufre maltratado al colocarle unas bolas de fuego en los cuernos y someterle para ser amarrado, según informa Ical.
El Toro Jubilo es el único de este tipo con fuego en Castilla y León y está declarado como festejo taurino tradicional desde 2002.
La suspensión ha provocado «indignación» en el pueblo que considera que se les quita una parte esencial de su cultura y de sus tradiciones. Tal es así, que mañana se concentrarán los taurinos y los antitaurinos a la misma hora pero en diferentes partes del pueblo.