El trasiego de los profesionales enfrascados en el remate de los detalles anuncia el inminente final de la construcción del complejo residencial de Santa Bárbara cinco años después del derribo de los viejos cuarteles, ocurrido allá por el mes de febrero de 2020.
La obra ya está finalizada y, a la espera de la inauguración de los espacios públicos habilitados, los responsables de esta actuación -la promotora Edificio Plata 3- ya ponen el foco en las siguientes fases que llevarán a escriturar las últimas viviendas en mayo de 2025.
Además de levantar 168 viviendas libres y otras tantas de protección oficial, esta actuación tiene un doble valor histórico y urbanístico de gran relevancia. Y es que este sector por fin se abrirá a la ciudad casi 70 años después de que la dotación militar de Artillería iniciara su actividad.
El parque lineal dispone de un espacio para la práctica del baloncesto. - Foto: Luis López AraicoEra 1957, aunque el proyecto de las instalaciones que el Ejército levantó en la calle Santa Bárbara se impulsó en 1954. Después de 45 años de actividad, esa dotación de 50.000 metros cuadrados se convirtió en 2002 en un compendio de edificios que servían de almacenes y patio de ejercicios y prácticas puntuales.
Antes o después había que dar respuesta a esta circunstancia. En febrero de 2019 Edificio Plata 3 pagó a Defensa 13,1 millones de euros por los terrenos y comenzó así el proceso de construcción del complejo de viviendas que hoy dinamiza esta zona de la capital.
Al adiós de este símbolo de las dependencias militares repartidas en Burgos en el siglo XX se une a la inclusión en el entramado urbano de una parcela que da continuidad a la calle Lavaderos y permite coser el barrio de Fátima con la avenida Castilla y León, que vivían separados hasta ahora.
Un busto de Miguel Delibes preside el parque en la intersección con Eulalia Cáceres. - Foto: Luis López AraicoDe esta forma, la ciudad de Burgos contará de forma inmediata con tres nuevos viales que darán forma a las diferentes conexiones planteadas en el entorno de las calles Severo Ochoa y Santa Bárbara. Una de ellas, la calle Ucrania, será peatonal y ofrecerá un paso libre a la zona comercial donde el Aldi también se afana en los últimos trabajos previos a la apertura del nuevo supermercado.
Las otras dos comunicaciones tienen un lugar preferente para incorporar la zona residencial al mapa del tráfico y a la trama peatonal. El vial que va de este a oeste, con el nombre de Miguel Delibes, dará soporte de acceso y salida a los vecinos. Al mismo tiempo ofrecerá otro paso entre Gamonal y la avenida de Castilla y León. Por su parte, el trazado que cruza de norte a sur rinde homenaje a Eulalia Cáceres y deja el camino expedito para unir el nuevo parque de la promoción de Santa Bárbara con el parque de los Poetas.
La mencionada zona peatonal es, de hecho, uno de los factores urbanísticos decisivos de toda la promoción. De forma lineal, el paseo comprende el espacio que unirá Obdulio Fernández y Lavaderos para dar una alternativa a los viandantes y evitar rodeos.
Todos los elementos, los naturales y los incorporados para el ocio, están ya preparados para ofrecer servicio a los ciudadanos. El parque, separado de una nueva zona privada de uso público, cuenta con un carril bici pegado al muro del cuartel general de la División San Marcial. Además, presenta un pequeño 'bosque' formado por los árboles levantados al comienzo de la construcción y un pequeño sendero paralelo al paso urbanizado. A partir de ahí nace un hilo conductor que lleva a la zona de juegos infantiles, a un pequeño foro con grada y a una cancha de baloncesto circular con tres canastas.
En la confluencia entre las calles Eulalia Cáceres y Miguel Delibes se levanta una escultura en honor al escritor a iniciativa de la promotora. La obra del artista Teodoro Ruiz comparte protagonismo en ese punto con una fuente ornamental que completa la apuesta de este parque lineal público.
Todo está (casi) listo para la inauguración oficial de la zona pública. Todo, salvo la excepción ya conocida de la parcela dotacional que el Ayuntamiento debe activar en el futuro. Este periódico ya avanzó el pasado mes de abril que la intención de los responsables municipales es construir en esos 4.827 metros cuadrados disponibles una piscina cubierta que se sumaría a la relación de dotaciones públicas que mejorarán el entramado urbano y ampliarán los servicios. Mientras el equipo de Gobierno decide qué hacer con él, este espacio permanecerá vallado o ajardinado.