La vendimia de 2022 avanza a buen ritmo. Un total de 131 bodegas ya han abierto sus puertas y, hasta ahora, ya se han recogido 11.249.183 kilos de uva, según los datos del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
De acuerdo con el último informe del organismo, todo apunta a que la cosecha cuenta con «un estado sanitario excelente y una calidad enológica adecuada, pero descompensada con respecto a los datos habituales de la zona», por el calor sofocante de este verano y la escasez de precipitaciones. La ola de calor de julio dejó nuevos récords de temperaturas máximas en Aranda, donde se alcanzaron los 41,4 grados el 16 de julio y se superó el límite de 40 grados durante tres días consecutivos, lo que provocó «un intenso estrés en el viñedo». En cualquier caso, en el informe se recalca que «las uvas siguen madurando adecuadamente, aumentando cada día la calidad del fruto».
La suma de estos factores hacen que esta añada sea «diferente, con una heterogeneidad muy alta en toda la zona». De hecho, la vendimia comenzó el 30 de agosto y se prevé que se dilate en el tiempo ya que «cada parcela se tendrá que vendimiar en el momento preciso». Dos tercios de las bodegas aún no han empezado.