El presidente nacional de Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), Pedro Barato, aseguró hoy en Burgos que no están "en contra del lobo", pero sí contra el hecho de que sea un "privilegiado con respecto a la ganadería", en referencia a la carta emitida a la Comisión Europea por varios países de la Unión Europea, entre los que figura España, pidiendo que la protección al lobo continúe como está. Una decisión por parte del Gobierno español que Asaja calificó de "ensañamiento" con los ganaderos.

"Estamos tratando que haya un control cinegético, no solo al norte, sino también al sur del Duero y en cualquier parte del país donde haya este tipo de problema", afirmó Barato, durante el encuentro con los medios que mantuvo hoy en la capital burgalesa para exponer las propuestas y demandas con las que esta organización agraria concurre a las elecciones del campo del próximo 12 de febrero.

Asimismo, avanzó que esta semana se anunciará un trabajo llevado a cabo por Asaja Castilla y León para que "se incrementen las indemnizaciones de los daños producidos por el lobo". "No queremos esas indemnizaciones, pero mientras esto se arregla, mejor es un incremento de la indemnización que otra cuestión", afirmó.

En esta línea, reiteró que el objetivo de Asaja es "defender al ganadero y su ganado", y por ello considerando que el lobo tiene que tener "menos privilegios que los que está teniendo ahora mismo". Recordó así que la suya es la única organización que se ha posicionado "frente a la Ley de Bienestar Animal". "Prefiero trabajar por el bienestar de las personas antes que por el bienestar de los animales. El bienestar animal es esencial, y ya lo hacemos en nuestras explotaciones", matizó. Por esta razón cree que el bienestar animal se debe ver en el mundo rural "de otra forma".

A preguntas de los medios acerca de si cree que puede haber una reversión con respecto a esta decisión por parte de Europa, el presidente nacional de Asaja afirma que están trabajando en ello y que le gusta ser "positivo". "Si nos damos cuenta de que tiene sus deficiencias, cambiémoslo. Lo que se ha hecho es malo porque se hace sufrir al ganadero", explica. Por ello, considera que se puede "revertir", y recuerda que hay países "muy potentes" que lo han hecho."Creo que, trabajándolo, se puede revertir", concluyó.