Da igual que sea jueves, da igual que haga muchísimo calor. Se añade el gorro al uniforme sonorámico y a coger sitio a la Plaza del Trigo, que desde la primera actuación derrocha ya ganas de fiesta. La jornada ha empezado con las actuaciones de Candela Gómez y Éxtasis.
A ritmo de Potra salvaje y Pedro, Pedro, Pedro el público ha esperado a la banda barcelonesa Malmö 040, que comienza fuerte con uno de los temas más conocidos de su último álbum, Los cobardes viven siempre. Y en todo Aranda resuena ya su letra: Esta es la última canción que habla de nosotros dos/Voy a pasar la vida al sol para quemar este dolor.
Mientras, los voluntarios de la Agrupación de Protección Civil de Aranda no para de refrescar al público, que además ha sido regado con abanicos, apluadidores y sombreros, regalo de uno de los patrocinadores del festival.
A las 3 de la tarde Javier Ajenjo ha cumplido con la tradición y ha subido al escenario 'triguero' para anunciar la actuación de Niños Mutantes, la primera de las grandes sorpresas que promete este Sonorama Ribera, además de recordar que Aranda necesita un tren y lo necesita ya.