El San Pablo Burgos conquistó una meritoria victoria (45-67) en la cancha del VEF Riga porque acudió a la cita con solo siete jugadores profesionales y tres del filial. Pese a no estar acertados en el tiro de tres, los burgaleses se aplicaron en defensa y consiguieron aguantar el pulso a rival, que estuvo lejos del nivel que mostró hace unas semanas en el Coliseum y no tuvo el día en el tiro.
El choque estuvo igualado durante los tres primeros cuartos, pero los azulones lo rompieron en el tramo decisivo. Lejos de acusar el cansancio por la falta de entrenamiento, incrementaron sus prestaciones agarrados a un inmenso Salash. Las continuas rotaciones de Peñarroya, en las que entraron también Alonso, Infante y sobre todo Queeley, resultaron importantes a la hora de no desgastar al equipo. Salash y Rivero, con 17 de valoración cada uno, fueron los más destacados.
Ficha técnica.
VEF Riga: Zoriks (6), Allman (6), Piñeiro (8), Kyser (6) y Kulvietis (6) -cinco inicial- Krumins (0), Skele (6), Ate (2), Kohs (5), Salmins (-) y Helmanis (0).
San Pablo Burgos: Renfroe (9), McFadden (12), Kareem Queeley (4), Jasiel Rivero (11) y Max Salash (10) -cinco inicial- Ángel Infante (1), Álex Barrera (6), Xavi Rabaseda (4), Alberto Alonso (0) y Sakho (10).
Marcador: 16-20 (primer cuarto) 10-15 (descanso, 26-35), 15-13 (tercer cuarto, 41-48) y 4-19 (45-67).
Árbitros: Manuel Mazzoni y Tolga Sahin (Italia) y Carsten Straube (Alemania).
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Basketball Champions League, disputado en el Arena Riga.
(Crónica completa, reacciones y más imágenes, mañana jueves en la edición impresa de Diario de Burgos)