Rebajas a medio gas en Aranda tras una Navidad muy animada

I.M.L. / Aranda
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Las ventas no se han visto resentidas por la subida de precios y algunas tiendas aseguran haber ganado clientes. El inicio de los descuentos se diluye entre los cambios de prendas y las compras se espacian

El movimiento de clientes en los primeros días de descuentos tras la campaña de Navidad es escaso en Aranda. - Foto: I.M.L.

El sentir del comercio en la capital ribereña sobre las ventas al inicio de en la campaña de Navidad se cumplió. Confiaban en que el movimiento de clientes aumentase al llegar a las fechas centrales de las fiestas navideñas y acertaron, cambiando de forma sustancial las sensaciones de las primeras semanas de diciembre. Tanto se animaron los compradores que los comerciantes utilizan calificativos como animada, excepcional o muy buena para definir cómo ha sido este periodo especial para las compras.

En el ámbito de los establecimientos de moda, salvo excepciones contadas, el nivel de ventas ha superado el de años anteriores por estas fechas. Algunos lo achacan a las condiciones meteorológicas. «Creo que ha sido una de las mejores campañas de Navidad de los últimos tiempos, pero yo creo que fue porque en octubre y noviembre no se vendió mucho porque hacía buen tiempo, así que la gente ha esperado hasta ahora para comprar la ropa de invierno», analiza Sagra Pérez, de H2O, en plena Plaza Mayor arandina, que tiene claro cuál ha sido el producto estrella en su tienda. «Los calcetines de Aranda han sido un éxito, no creo que haya nadie que no tenga un par de Cagüen Socks en casa», asegura.

Una línea similar de ventas ha registrado Miss Cactus, donde su responsable, Miriam Encinas, tiene un balance muy positivo. «Ha sido una Navidad excepcional, incluso mejor que la de años anteriores», reconoce satisfecha por la respuesta de la clientela. Olga Rojo, desde Marabela, apunta desde su propia experiencia de años que «ha estado bien, animado, pero en la línea del año pasado», mientras que en el sector del equipamiento deportivo, Juan González de Dream Team reconoce que no acertó con sus pronósticos. «La campaña ha estado bien, mejor de lo esperado, pero en la línea de lo que se vendió el año pasado por estas fechas», explica a la vista del trajín de clientes que ha tenido en las últimas semanas.

En otra circunstancia en la que coinciden la mayoría de los comerciantes locales es que los arandinos y ribereños no son clientes de los que escalonan los gastos en regalos y «lo dejamos todo para el último momento», como verbaliza Lorena Bodas, de Todo Libro. «Hemos tenido una muy buena campaña, pero hemos notado que el gasto medio por cliente ha sido menor que otros años, pero hemos tenido más gente. Es satisfactorio ver cómo se apuesta por la cultura», confiesa agradecida, aunque reconoce que las jornadas previas a Navidad y Reyes fueron maratonianas. «Veníamos a las 9 y nos íbamos a las 22 horas, para poder atender todos los pedidos», apunta como prueba de que lo de ir a última hora es casi norma de la ciudad.

Adiós a una tradición. Otra situación es la que se está viviendo esta semana con el arranque de las rebajas, y todos los comercios vuelven a coincidir en una misma idea. «Las rebajas ya no existen, la gente no se espera y, cuando necesita algo, lo compran», apunta Juan González. «Ya no son como antaño, son más tranquilas y las ventas más repartidas en el tiempo que antes», valora Olga Rojo. «Las rebajas ya no son como eran antes, hemos empezado muy flojo y, además, con el mal tiempo de esta semana, ha venido menos gente, esperemos que mejore», explica Miriam Encinas.

Eso sí, en lo que va de semana, más que compras de rebajas los establecimientos han atendido a gente que necesitaba hacer cambios de los regalos navideños por otra talla o distintos modelos. Otro clásico del inicio comercial de enero.