Tubilla del Lago supera los 60 murales en su visita guiada

D. Orbaiz / Aranda
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"Ya tenemos uno por cada dos vecinos". La tercera edición del Tubifest regala 8 obras más a una localidad volcada con el objetivo de embellecer sus calles y paredes

Tubilla del Lago supera los 60 murales en su visita guiada - Foto: P.M.

Tubilla del Lago supera ya los 60 murales en las paredes, fachadas y portones de sus casas, garajes y corrales, gracias a la tercera edición del Tubifest, certamen que se cerró a finales de junio con 8 nuevas creaciones. Todas ellas se han incorporado ya a la ruta de las visitas guiadas gratuitas que el segundo sábado y domingo de cada mes organizan en la localidad, dentro del programa del grupo de acción local ADRI Ribera del Duero, y que se pueden reservar a través de la web https://riberadeldueroburgalesa.com/

"Ya tenemos un mural para cada dos personas", celebra Pilar Manso, una de las promotoras de la iniciativa. Estas creaciones artísticas llaman mucho la atención a los visitantes, "porque no se esperan encontrar algo así cuando llegan", confiesa.

La propuesta nació en 2017 a raíz de un viaje a Irlanda, en el que Manso observó unas pinturas preciosas y se le ocurrió importar la idea. Siete años después, se muestra muy satisfecha con el resultado. "Queríamos embellecer el pueblo, promover artistas locales y fomentar el turismo", explica. De hecho, los primeros murales fueron pintados por los propios vecinos. "Es el agua, el agua de Tubilla, que nos hace así de habilidosos", bromea Manso.

Gracias al proyecto, que ha cumplido ese triple objetivo, también se han podido dar a conocer algunos pintores emergentes locales. El festival ha incluido desde su primera edición un concurso, que este año ha alumbrado 8 murales en otras tantas puertas de corrales abandonados.

La temática de los murales es libre, pero desde la Asociación, que pretenden conseguir asentar el Tubifest como una tradición que se prolongue en el tiempo, han valorado la idea proponer algún tema novedoso cada año: "Que refleje alguna tradición o cultura propia, por ejemplo", reflexiona la organizadora.

Mejorar el mantenimiento. Pintar en antiguas fachadas y viejas puertas entraña problemas de conservación de los murales, que acusan el paso del tiempo. Al principio no lo tuvieron en cuenta, pero ahora preparan muy bien con imprimación las superficies y han conseguido mejores resultados. Además, durante este verano se van a llevar a cabo labores de limpieza y restauración de los murales más veteranos, porque han perdido algo de brillo y color. "Eso da una mala imagen de descuidado y de abandono que no queremos para nada" concluye Manso.