Benteler apuesta por el empleo, pero necesita transformarse

G. ARCE / Burgos
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La multinacional alemana quiere que Villalonquéjar se convierta en una planta inteligente y en dos años empiece a fabricar en serie en Burgos nuevos modelos de Volkswagen, Mercedes y Volvo

Benteler suma cerca de mil empleados en las fábricas de Villalonquéjar y Palencia, ambas dirigidas desde Burgos. - Foto: Patricia

Benteler apuesta por la estabilidad laboral y la formación del talento en el proceso de transformación de sus plantas de los polígonos de Villalonquéjar y Venta de Baños (Palencia). Este es el mensaje de la dirección ambas factorías (radicada en Burgos) tras las últimas semanas de inestabilidad en la plantilla local por la presentación de un ERTE que luego fue retirado y la salida de los trabajadores de la subcontrata de logística Serveo. 

Al igual que ocurrió en las crisis de la automoción de 2008 y en la de la pandemia, el objetivo de la multinacional alemana es superar la transición en la que está inmersa  el sector «sin realizar grandes reestructuraciones y buscando soluciones alternativas y negociadas con los representantes de los trabajadores, demostrando su compromiso con su equipo humano».

La fábrica, detallan, está inmersa en un proceso de transformación para convertirse en una planta inteligente. «Desde 2020, Benteler ha invertido en tecnologías de última generación, como redes integrales que conectan digitalmente todos los procesos, desde la entrada de materias primas hasta el producto final. Estas mejoras incluyen la adquisición de una prensa de estampación avanzada, tecnologías de big data, visión artificial y vehículos robotizados AGV para optimizar la cadena de suministro».

Con el respaldo de los fondos europeos obtenidos con los PERTE, la fábrica afronta la fabricación en serie de componentes para los nuevos modelos eléctricos de marcas como Volkswagen, Mercedes Benz y Volvo, «cuyo lanzamiento en serie está previsto hacia finales de 2026 y que consolidará la posición de Benteler como referente en el sector automovilístico y garantizará su presencia a largo plazo en España».

Roberto Cossío, director de las plantas de Burgos y Palencia asegura que «estamos muy ilusionados con los cambios que estamos realizando en la planta. Todas estas inversiones y mejoras nos hacen afrontar el futuro con ilusión y seguridad».

La empresa, añade, va a apostar por la formación y por mantener a un equipo cualificado. La finalidad es preservar el talento mientras impulsa el crecimiento profesional de sus empleados. «Este compromiso se refuerza con el acceso a tecnologías avanzadas y procesos innovadores que garantizan la competitividad en un sector tan exigente».

Números. Benteler alcanza una facturación de 709 millones de euros en Castilla y León y suma una plantilla cercana al millar de trabajadores, en torno a los 550 de ellos en Villalonquéjar.

Entre los proyectos anunciados en los últimos tiempos está una inversión de 35 millones de euros compartida con las plantas de Vitoria y Burgos. Esta inversión, apoyada por un PERTE, está destinada a la producción de módulos de suspensión para el nuevo modelo eléctrico de Mercedes-Benz. La planta de Villalonquéjar contribuirá con los componentes del chasis, además de suministrar piezas estampadas en caliente directamente al cliente.

Benteler también fabricará, con el apoyo de la UE, un eje para vehículo eléctrico en su fábrica.