Comienza la cuenta atrás para el derribo del viejo Mercado Norte en el centro de Burgos. Este lunes quedará cerrada al tráfico la plaza de Hortelanos, de modo que los conductores tendrán que buscar otras alternativas de aparcamiento, ya que se perderán un centenar de plazas -de zona azul-. Durante el tiempo que duren las obras se instalará un vallado provisional y cuando culmine el derribo se colocará otro definitivo hasta que se construya el nuevo edificio. 

Según ha explicado el concejal de Urbanismo, Juan Manuel Manso, el primer mes se trabajará en el desmantelamiento del interior del edificio. De hecho, el sistema de climatización se retirará y se instalará en el provisional. Las máquinas se colocarán en los jardines de los soportales de plaza España. No será hasta avanzado marzo cuando se inicie el derribo de la estructura. La acera quedará vetada al peatón, aunque las obras no afectarán al tráfico rodado. Cuando concluyan los trabajos se construirá un muro hasta que se levante el definitivo. En ese momento, podrían recuperarse algunas plazas de aparcamiento, aunque Manso auguró que "serán muy pocas".

Por otro lado, la junta de Gobierno ha dado luz verde al proyecto de demolición del velódromo José Manuel Sedano. La actuación está supeditada a la aprobación del presupuesto de 2025, pero hasta que sea una realidad deberá elaborarse el pliego de condiciones para sacar la obra a concurso.