Frías batió en 2024 un nuevo récord de visitantes interesados en conocer los rincones más fotografiados y publicados en las redes sociales, y a lo largo de los últimos doce meses más de 83.950 personas solicitaron información en la Oficina de Turismo municipal, 20.710 más que el año anterior.
El Castillo, las Casas Colgadas o las cascadas del barrio de Tobera se convirtieron de nuevo en los escenarios preferidos de los viajeros para posar, procedentes en su mayoría del País Vasco, Castilla y León y Madrid. Tanto los comerciantes de la ciudad más pequeña de España como los vecinos coinciden en que «gracias a las plataformas digitales y al trabajo de promoción» a través de ellas la localidad «ha ganado fama». Marta, propietaria del supermercado y la carnicería Hermanos Pérez, afirma que «a diario atiende a turistas de paso», mientras que Miriam, dueña del estanco, cree que el boom turístico llegó con la «inclusión en la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España».
Los encantos fredenses y una amplia programación cultural y de ocio ampliada a todos los meses del año conquistó a más de 4.500 visitantes de otras nacionalidades (un incremento del 25,3% respecto a 2023,) entre ellas francesa, americana, inglesa, australiana o neozelandesa. Las obras de ampliación de los servicios en el área de caravanas, que «previsiblemente volverá a funcionar a partir del 1 de marzo, una vez que se instale el sistema de control de acceso», según informa la concejala Silvia Quintana, han repercutido en que los turistas que viajaban en estos vehículos optaran por pernoctar en otras áreas cercanas.
Las llamadas rutas guiadas medievales, las cuales transcurren por el casco histórico, la Iglesia de San Vicente y el Castillo, cogieron peso respecto a las monumentales, de menor duración, y los grupos gestionados por las agencias de viajes fueron los mayores demandantes del servicio seguido por las asociaciones culturales.
En La Bureba. El municipio de Briviesca se posiciona como la segunda localidad de la comarca que más visitantes recibió, 25.661 (24.901 durante 2023), y la Iglesia de Santa Clara lideró el listado de los monumentos más visitados. Una de sus tallas artísticas más relevantes, El abrazo de San Joaquín a Santa Ana, y otra que descansa en el templo de San Martín, San Juan de Ortega como peregrino), participaron en la exposición de las Edades del Hombre (Villafranca del Bierzo).
La villa de Oña también comprobó como el turismo rural ganó peso y 22.410 personas se acercaron al emblemático Monasterio de San Salvador, casi mil más que en 2023, como consecuencia de la apertura al público del patio del claustro barroco, el patio de San Íñigo, la escalera magna y el acceso principal a los jardines benedictinos.
Las obras de rehabilitación de las salinas, los hallazgos en la ciudad romana de Flavia Augusta y una agenda repleta de actividades lograron que el número de viajeros que pasaron una o varias jornadas en Poza de la Sal se incrementara ligeramente con respecto a la anualidad anterior, pasando de 16.500 a 16.853, de los cuales 547 eran extranjeros. La campaña de excavación dirigida por la arqueóloga Esperanza Martín continuará un año más y el Ayuntamiento pretende comprar a Adif tres edificios de la antigua estación de tren y reconvertirlos en museo, laboratorio y vivienda.