Si hace apenas dos meses parecía que la tan prometida ampliación del Museo de Burgos estaba condenada al olvido, lo cierto es que la Junta de Castilla y León ha dado un giro de timón y parece de nuevo decidida a acometer las obras. En declaraciones a este periódico, el consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, ha asegurado que la ampliación se va a ejecutar y como prueba de ello garantiza haber acordado con el presidente del Ejecutivo autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, que contará con partida presupuestaria, procedente de fondos extraordinarios, para las próximas tres anualidades.

El inicio de las obras no será inminente, ya que en la Consejería de Cultura entienden que el proyecto que existe está sobredimensionado y es necesario actualizarlo. Es decir, antes de poder ver máquinas en el inmueble será preciso modificarlo. Y esa tramitación puede no ser rápida. Cabe recordar que en su día se habló de que sería necesaria una inversión de entre tres y cinco millones de euros. Eso sí, aquellos precios tienen ya unos años y están sin actualizar.

También será necesario actualizar el protocolo general que se firmó en 2018 entre la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Cultura con el que la Administración regional se comprometía a sufragar el coste de la ampliación con cargo a sus propios presupuestos. Un acuerdo que está caducado y que es preciso renovar.

Cabe recordar que el inmueble es de titularidad estatal, pero la Junta de Castilla y León decidió colaborar en la mejora de sus instalaciones y sufragó la redacción de un plan director para actuar en varias fases (...).

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